Contrariando todas las previsiones y encuestas , los electores colombianos no han aprobado el Acuerdo con las FARC-EP firmado en Cartagena de Indias .El NO obtuvo en el plebiscito 6 441 000 votos y el Si solamente 6 377 482. El centro del país,densamente poblado, votó contra, con excepción de la capital;el SI venció en el litoral del Pacifico ,en el Caribe y en los departamentos amazónicos.
Casi un cuarto de los electores optó por la abstención. La escasa victoria del NO por 54.000 votos confirmó que el pueblo colombiano continua profundamente dividido.
La situación creada es muy compleja y el futuro inmediato impredecible.
Las centenas de periodistas y observadores internacionales que se encontraban en Bogotá, llegados de decenas de países, solamente coinciden en la enorme sorpresa resultante del desenlace inesperado del plebiscito.
¿Qué va a ocurrir en las próximas semanas?
Cualquier previsión sería irresponsable.
Reunidos en La Habana , en donde acompañaron la votación, los dirigentes de las FARC-EP que participaron en las negociaciones durante cuatro años afirmaron por vía de la palabra del comandante Rodrigo Londoño (Timochenko), que la organización sigue luchando por la paz. ¿Cómo? No quedó claro.
El Presidente Juan Manuel Santos divulgó en Bogotá una declaración semejante.
El horizonte político es sombrío y confuso.
La convicción de las FARC-EP de que el Acuerdo seria fácilmente aprobado era tan firme que en la Décima Conferencia de la Organización, realizada hace dias en el Sureste de Colombia, ya tenían escogido la data de Mayo de 2017 para su transformación en partido Político.
El cese del fuego bilateral, firmado en 29 de Agosto, permanece vigente. Pero la guerrilla perdió la inmunidad que el Acuerdo le garantizaba. Es significa que los dirigentes de las FARC son para la Justicia colombiana peligrosos terroristas cuya captura es exigida por los uribistas y una magistratura mayoritariamente corrupta y reaccionaria.
Ante a la nulidad del Acuerdo, millones de colombianos formulan ahora una pregunta: van las FARC ,como estaba previsto, a entregar las armas?
El fantasma de la masacre de la Unión Patriótica en 1984 no desapareció de la memoria colectiva.
En lo inmediato , cualquier desplazamiento de guerrilleros de las FARC-EP depende del Presidente Santos, el gran derrotado en el plebiscito. Su margen de maniobra es, sin embargo, reducida.
Uribe Vélez, que dirigió la campaña de la ultra derecha por el rechazo del Acuerdo surge al contrario en una posición cómoda. Pero la escasez del resultado explica la hipocresía de su discurso de la victoria. Sorprendentemente afirmó estar abierto a luchar por la paz.
¿Pero qué paz puede desear un político neofascista que siempre defendió la guerra y la represión, apoyado por los halcones de las más poderosas Fuerzas Armadas de America Latina (600.000 militares entre Ejercito y Policía)? Para Uribe la paz pasa por la capitulación total de las FARC-EP. Los dirigentes de la organización quedarían privados de derechos políticos y muchos guerrilleros serian detenidos y juzgados como criminales.
La única certeza hoy es preocupante. Independientemente de las insuficiencias de un Acuerdo en que las FARC-EP habían ya renunciado a objetivos por los cuales combaten desde su fundación, es transparente que los colombianos progresistas y las fuerzas revolucionarias de América Latina han sufrido una derrota histórica.
Source: Contagio Radio