Varios bancos occidentales se oponen activamente a los planes de la UE de apropiarse de miles de millones de euros en intereses devengados por activos rusos congelados, informó la agencia de noticias Reuters.
Temen que la asignación pueda dar lugar a costosos litigios, según Reuters que citó lo que llamó fuentes de alto nivel de la industria.
Los líderes de la UE acordaron el jueves asignar hasta 3.000 millones de euros (3.200 millones de dólares) en intereses sobre el dinero ruso congelado anualmente para el suministro de armas a Ucrania.
Los aliados occidentales han congelado más de 300.000 millones de dólares en activos rusos. Según el Ministro de Finanzas de Rusia, Anton Siluanov, más de 3,5 millones de rusos también tienen congelados activos en el extranjero por valor de alrededor de 1,5 billones de rublos (16.320 millones de dólares).
Algunos bancos temen, sin embargo, ser considerados responsables ante Rusia si participan en alguna transferencia de dinero a Ucrania.
Temen que el plan de la UE pueda extenderse a los activos en cuentas que mantienen para personas y empresas sancionadas, lo que provocaría una mayor erosión de la confianza en el sistema bancario occidental.
Las personas, que según Reuters prefirieron permanecer en el anonimato, expresaron sus temores a los responsables políticos británicos y de la eurozona.
Destacaron la posibilidad de acciones legales que puedan surgir una vez que las sanciones antirrusas finalmente se relajen o se levanten.
Rusia ha advertido que cualquier intento de apoderarse de su capital o activos se considera “bandidaje”, lo que dará lugar a años de procedimientos judiciales contra los autores.
El gobierno ruso ha dejado claro que responderá con represalias si se confisca alguna de sus propiedades o ingresos.
Según la propuesta de la UE, aproximadamente el 90% de los fondos confiscados se destinarán al llamado Fondo Europeo de Paz para proporcionar armamento a Ucrania.
Source: Agencias (traducido por el sitio de Al Manar en español)