Los extremistas tratan de destruir la estabilidad de Egipto, afirmó el sábado el presidente Abdel Fattah El Sisi tras un viernes borrascoso durante el cual el Ejército sufrió 26 muertos.
El presidente ha ordenado ejercer ‘una vigilancia extrema’ para enfrentar esos planes criminales, dijo en un comunicado el portavoz oficial Alaa Yusuf, el cual cita la reacción del mandatario a la ola de ataques de este viernes en el norte de la península de Sinaí y la muerte de un alto oficial de las fuerzas de seguridad en El Cairo.
Las fuerzas de seguridad repelieron los atentados dinamiteros y los ataques armados contra puntos de control en la ciudad de Rafah, reivindicados por el grupo EI, y causaron 40 muertos a los asaltantes, acorde con la versión oficial.
Pocas horas después la misma fuente reportó la muerte a balazos a manos de desconocidos que viajaban en una motocicleta de un alto oficial de las fuerzas de seguridad que se dirigía a orar en una mezquita.
En horas tempranas de ests sábado las mismas fuentes comunicaron la muerte de dos hombres sindicados como terroristas durante el allanamiento a un apartamento en la ciudad satélite cairota del 6 de Octubre tras una confidencia de la presencia de elementos sospechosos en la vivienda.
La fuente añadió que en el lugar fueron encontrados armas y explosivos.
Tras el derrocamiento por el Ejército en 2013 del presidente Mohamed Mursi, directivo de la Hermandad Musulmana, aumentaron los ataques contra bases castrenses en el Sinaí y los atentados contra edificios gubernamentales e iglesias de los cristianos coptos, influyente minoría confesional en este país de mayoría musulmana.
Source: PL