El líder del movimiento Ansarulá de Yemen, Sayyed Abdul Malik Badreddin Al-Huzí, elogió y agradeció a Dios por la gran victoria con la humillante huida de los marines estadounidenses de Saná.
En el aniversario de la huida de los marines estadounidenses de Yemen, Huzí dijo que la derrota estadounidense en Saná es una gran bendición de Dios, una gran victoria y un gran logro para el pueblo yemení
La huida de los marines de Saná fue un fracaso del proyecto estadounidense de controlar completamente nuestro país con todas sus consecuencias y fue un gran e importante fruto de la Revolución del 21 de septiembre, agregó.
“La liberación de la hegemonía estadounidense y el control estadounidense preservó la dignidad humana de nuestro querido pueblo”, dijo Sayyed Huzí, “Ningún pueblo en todo el mundo puede ser libre mientras EEUU lo controle en todos sus asuntos”.
Según Sayyed Huzí, aquellos que ven a los estadounidenses como un benefactor y un destino confiable para lograr intereses y ganancias tienen una visión estúpida y equivocada.
Huzí subrayó la codicia y las ambiciones de EEUU, como se refleja en los comentarios hostiles de Trump, al dirigirse incluso a los países no islámicos, y agregó que la administración estadounidense no trata a los demás con respeto.
El programa de los estadounidenses era llevar a Yemen al borde del colapso en todos los ámbitos, dijo Huzí.
“El proyecto estadounidense-israelí es un proyecto agresivo y destructivo que apunta seriamente a nuestra nación con el objetivo de ocupar una gran área geográfica de los países de nuestra nación”.
El proyecto estadounidense-israelí busca confiscar los lugares sagrados. No solo la mezquita Al-Aqsa, sino que La Meca y Medina son parte del proyecto sionista, afirmó Huzí, y agregó que el enemigo busca robar a la nación todo lo moral de los principios y valores y privarlo de toda la guía divina que puede fortalecerla para estar al nivel de la confrontación.
“El enfoque estadounidense plantea un peligro para toda nuestra nación sin excepción, aunque el peligro apunta más a ciertos países, pero pospone el ataque al resto para etapas futuras. El proyecto sionista es destructivo y agresivo y no se puede adaptar, y perderá a cualquier pueblo que quiera adaptarse a él en este mundo y en el más allá”.
Sayyed Huzí enfatizó “nuestra posición firme, de principios, humanitaria, moral y religiosa de apoyo al pueblo palestino y sus muyahidines en todos los niveles, militar, político y en los medios de comunicación”.
El líder yemení afirmó la disposición incluso para la intervención militar en cualquier ronda de escalada contra Gaza en cualquier momento.
“Vimos el fruto de la firmeza y la confianza en Dios en la posición del pueblo palestino en la Franja de Gaza, a pesar de las circunstancias extremadamente difíciles. El capital del pueblo palestino en la Franja de Gaza fue la fe en Dios y en su causa y la adhesión a sus derechos legítimos, por lo que el resultado fue a su favor”.
“El segundo día (del alto el fuego) en la Franja de Gaza fue un día de victoria palestina, un día entusiasta, en el que las Brigadas Al-Qassam y las facciones palestinas aparecieron con todo orgullo y dignidad”, confirmó Huzí.
“La revolución islámica en Irán triunfó porque el pueblo iraní musulmán se movió y llevó la voluntad de salvarse de la hegemonía estadounidense implementada a través del Sha, que estaba a favor de EEUU e “Israel””, añadió.
El enemigo israelí fue derrotado en 2006 de manera humillante y mediante esa confrontación quería eliminar por completo a Hezbolá y someter al Líbano a él y a los estadounidenses.
Source: Diversas