El exembajador estadounidense en Damasco, Robert Ford, reveló un papel oculto de Occidente, en particular de EEUU, que indirectamente facilitó el ascenso de Ahmad Al-Shara al poder.
En una intervención a principios de este mes ante el Consejo de Asuntos Exteriores de Baltimore, Ford confirmó que EEUU desempeñó un papel indirecto, comenzando con una serie de reuniones en 2023, cuando Al-Shara aún dirigía Hayaat Tahrir Al-Sham bajo el alias de “Abu Mohammad Al-Yulani” hasta su eventual ascenso a la presidencia de Siria.
Señaló que una organización no gubernamental con sede en el Reino Unido, especializada en resolución de conflictos, invitó a un equipo europeo, del que Ford era miembro, para guiar a Al-Shara hacia la arena política, en lugar de permitirle permanecer en el seno de grupos armados. Estos esfuerzos, según Ford, formaban parte de una estrategia occidental más amplia de rehabilitación política.
“La primera vez que oí hablar de él fue durante mi estancia en Iraq, entre 2000 y 2003, donde fue una figura destacada en las operaciones de Al-Qaida en el norte de Iraq”, dijo Ford.
“En 2023, recibí una invitación de una ONG británica para ayudarlo a salir del mundo del terrorismo y prepararlo para un papel político”.
Según Ford, su primera reunión con Al-Sharaa tuvo lugar en marzo de 2023 y fue seguida por una segunda en septiembre. Su tercer y último encuentro tuvo lugar en enero de 2025, dentro del palacio presidencial en Damasco, después de que Al Sharaa asumiera el poder.
Ford señaló que las tres reuniones no fueron, por sí solas, suficientes para legitimar políticamente a Al-Sharaa. Más bien, marcaron la culminación de un proceso más largo que comenzó en 2016, cuando Al Sharaa rompió formalmente sus vínculos con Al Qaida y “comenzó a presentar una imagen más moderada en el contexto del movimiento de oposición sirio”.
Source: Agencia