Una investigación del Comando del Frente Interior y la Fuerza Aérea Israelí sobre el misil iraní que cayó ayer sin previo aviso en Haifa reveló que la causa fue el fallo en la detección de su ojiva.
El ejército israelí reconoció que la explosión en Haifa de ayer no se debió a un misil interceptor fallido, como se sospechó inicialmente, sino a un misil balístico iraní que no se detectó correctamente.
Añadió: “La ojiva no fue detectada. Por lo tanto, los misiles interceptores no se dispararon. Debido a al fallo de detección, esto no se comunicó a nuestros sistemas”.
Las sirenas no sonaron porque no se detectó el misil iraní
Según la investigación, se produjo un fallo técnico en la detección del misil. Por lo tanto, no sonaron las sirenas ni se lanzaron misiles interceptores para tratar de interceptarlo.
La ojiva no fue detectada y cayó en Haifa.
Según medios israelíes, se advirtió al público con antelación sobre una lluvia de misiles, pero no se emitió ninguna advertencia específica. El Comando del Frente Nacional no observó la trayectoria específica del misil ni emitió ninguna advertencia específica.
Cabe destacar que, según informes de medios israelíes, amplias zonas de los territorios palestinos ocupados fueron testigos de grandes y generalizados ataques de misiles iraníes ayer domingo.
Los medios israelíes informaron de impactos directos de misiles iraníes en seis lugares: Nes Tziona, Haifa, Tel Aviv, Beer Yaakov, Ramla y Or Yehuda. La televisión iraní informó que los misiles iraníes impactaron en al menos diez lugares diferentes sin que se activaran las sirenas antiaéreas.
Source: Al Mayadeen