La gran mayoría de los ex embajadores de EEUU en Israel se opusieron el jueves a la decisión del presidente Donald Trump de reconocer a Al Quds de Jerusalén como la capital de la entidad sionista, señalando que la decisión era profundamente errónea y podría generar violencia, informó la emisora de televisión israelí i24.
Contactados por el New York Times, los ex embajadores de EEUU a Israel dijeron que su país había perdido la oportunidad de hacer avanzar el proceso de paz.
“Hay muchas desventajas, tanto diplomáticas como en términos del proceso de paz en Oriente Medio, y no hay ningún beneficio”, dijo Daniel Kurtzer, embajador en Israel desde 2001 hasta 2005, durante el período de George W. Bush.
“Estamos una vez más aislados internacionalmente, con la excepción del gobierno israelí, que la apoya (la medida de Trump), y nos retiramos del papel que el presidente dice que quiere desempeñar como intermediario de paz”, dijo.
Otros embajadores afirmaron que la declaración de Trump conduciría a más violencia en la región.
“Es una medida arriesgada, y definitivamente costará vidas en Israel y la región”, dijo Richard Jones, embajador entre 2005 y 2009, también bajo Bush, y agregó que los colonos en Cisjordania se beneficiarán del anuncio para justificar una aceleración de la construcción en los asentamientos.
Los otros embajadores que se oponen a esta decisión son Martin Indyk, que sirvió durante la presidencia de Bill Clinton; William Andreas Brown, embajador desde 1988 a 1992; William Caldwell Harrop, embajador desde 1992 a 1993; Edward Djerejian, embajador desde 1993 a 1994; Thomas Pickering, embajador durante la Administración Reagan, y James Cunningham; embajador durante las administraciones de Bush y Obama.
Source: Diversas