EEUU, junto con Francia y el Reino Unido, lanzaron un ataque misilístico masivo contra Siria el 14 de abril en respuesta a lo que los estados occidentales afirmaron fue un ataque químico en la ciudad de Duma en la Guta Oriental, que fue inmediatamente atribuido a Damasco, pese a no contar con ninguna prueba.
El Ministerio de Defensa ruso ha anunciado que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPCW) confirmó que no se encontraron signos de la existencia de armas químicas en el centro de investigación de Barzeh en Damasco, a pesar de las alegaciones de los funcionarios estadounidenses.
El ministerio señaló además que miles de personas podrían haber muerto si hubiera habido efectivamente algún arma química en los sitios que fueron atacados por la coalición liderada por EEUU.
Anteriormente, surgieron informes sobre un supuesto ataque con armas químicas en Siria, que fueron publicados por un portal de noticias de la oposición siria en Internet el 7 de abril. Este sitio informó que se había producido un ataque químico en Siria en la ciudad de Duma, cerca de Damasco.
Reaccionando a los informes, EEUU y sus aliados europeos dijeron que el gobierno sirio del presidente Bashar Assad estaba detrás del ataque.
Moscú calificó a los informes noticiosos sobre el supuesto ataque químico de “engañosos” y advirtió contra los ataques militares contra las áreas sirias donde se despliegan las tropas rusas.
Los representantes del Centro de Reconciliación de Rusia para Siria inspeccionaron la ubicación del supuesto ataque en Duma e interrogaron a los médicos locales, quienes dijeron que no habían recibido individuos con síntomas de intoxicación química.
Source: Agencias