Aludiendo al retorno de las sanciones económicas contra Irán, la revista norteamericana The Atlantic ha indicado que el problema de Trump no se limita a Irán, sino que él tiene puntos de vista muy divergentes al resto de países del mundo y esto coloca a EEUU en una posición de aislamiento.
En un artículo titulado “Trump pasa de una amenaza a otra contra Irán y otros países del mundo”, el sitio web estadounidense The Atlantic escribió: “Tras la retirada de Donald Trump del acuerdo nuclear de 2015. y el restablecimiento de las sanciones anti-iraníes, el presidente de EEUU ha amenazado tanto a Irán como a todo el mundo. En la noche del lunes al martes, emitió un tuit en el que emitió una advertencia a los países que continuarían haciendo negocios con Irán afirmando que quien tuviera relaciones comerciales con Irán no podría tenerlas con EEUU.
Según The Atlantic, esto abriría un nuevo frente en la batalla económica de EEUU contra los europeos, que buscan preservar el acuerdo nuclear iraní (PAIC), por no mencionar a muchos otros países del mundo decididos a hacer negocios en Irán, un país de 80 millones de habitantes, rico en recursos naturales, como petróleo y gas, y con una posición geoestratégica envidiable, entre Oriente Medio, el Norte de Asia, Asia Central y el Subcontinente Indio.
Ya existen profundas diferencias entre EEUU y las otras partes del acuerdo -China, Francia, Alemania, Rusia, el Reino Unido y la Unión Europea- en una serie de cuestiones que se encuentran fuera del ámbito del PAIC: comercio y aranceles (China y UE), gastos de defensa (miembros de la OTAN y de la UE), cambio climático (China, Rusia y la UE) y sanciones (Rusia).
Aunque la administración Trump considera que sus desacuerdos están bastante separados del problema nuclear iraní, los países contemplan todas las políticas de Trump dentro del contexto de las cada vez más tensas relaciones de EEUU con el mundo.
The Atlantic continúa diciendo que las compañías estadounidenses y las extranjeras más grandes dejarán Irán bajo amenaza de sanciones, pero las pequeñas y medianas empresas de todo el mundo, con poca exposición al comercio con EEUU, seguirán aprovechando las oportunidades en el mercado iraní sin que las sanciones sean efectivas.
“De hecho, las sanciones de la administración Trump son muy diferentes a las de la era Obama y probablemente no tendrán el mismo impacto, principalmente porque no son aceptadas por nadie más”.
A pesar del llamamiento de Donald Trump a unas negociaciones, Teherán dijo que se niega a hablar con un país que se retiró del acuerdo nuclear de 2015. El presidente iraní dijo que la idea de negociar con EEUU era una “insensatez” en un momento en el que Washington se disponía a restablecer las sanciones contra Irán.
En una entrevista televisada unas horas después del restablecimiento de estas sanciones, Hassan Rohani acusó a Washington de “querer lanzar una guerra psicológica contra la nación iraní y provocar disturbios políticos” entre los iraníes.
“Si eres un enemigo y apuñalas a alguien con un cuchillo, y luego dices que quieres negociar, lo primero que debes hacer es retirar el cuchillo”, dijo Hassan Rohani. “¿Cómo pueden ellos probar que son dignos de confianza (para negociar)? Volviendo a unirse al PAIC”, señaló.
The Atlantic señala que varios países como China, India, Turquía o Japón son importantes clientes del petróleo y gas de Irán y EEUU no podrá convencerlos para abandonar sus transacciones energéticas con Teherán.
Rusia e Irán son aliados en Siria y prácticamente han ayudado a llevar a Bashar al Assad a la victoria en la guerra contra los terroristas. China es el mayor importador de petróleo iraní y ha invertido fuertemente en energía e infraestructura en Irán.
Por todo ello, The Atlantic cree que las sanciones de la administración Trump contra Irán serán un fracaso y contribuirán a hacer chocar a EEUU con las otras grandes potencias, incluyendo la UE.
Source: Diverso