Jordania toma un poco más de distancia cada día con respecto a Israel. La transmisión de imágenes de la ministra de Información de Jordania, Yumena Ganaimet, caminando sobre la bandera israelí a la entrada de la sede de los sindicatos en Ammán, ha provocado la ira de Tel Aviv.
A través del portavoz de su Ministerio de Relaciones Exteriores, Tel Aviv ha protestado enérgicamente ante las autoridades jordanas contra el pisoteo de la bandera israelí por parte de Yumena Ganaimet, la ministra de Información jordana, que también es la portavoz del gobierno jordano, cuando entró en la sede sindical en Ammán para asistir a una reunión del gobierno, informó el diario israelí Yediot Aharonot.
Como recordatorio, Yumena Ganaimet criticó a Washington a principios de julio por no haber informado a Jordania sobre los detalles del “acuerdo del siglo”, al tiempo que enfatizó la postura firme de Ammán en contra de la transferencia de la embajada de EEUU a Al Quds.
El experto árabe en cuestiones de seguridad, Abbas al Ardawi, filtró un complot de EEUU, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos para imponer el “acuerdo del siglo” a Jordania. Ellos fueron aún más lejos en su conspiración y amenazaron con transferir a los terroristas del Daesh al territorio jordano, señaló Ardawi.
Opuestos a cualquier normalización de las relaciones con Israel, los sindicatos en Jordania han pintado una bandera israelí en la entrada de su sede con signos de zapatos, invitando a todos los que entran en ella a pisar la bandera israelí.
La noticia llega días después de que el rey Abdulá II de Jordania anunciara durante una reunión con los periodistas, su intención de reanudar las relaciones con Siria.
“Le deseamos buena suerte a Siria y esperamos que la situación se normalice lo antes posible en el país vecino”.
Tomando cada vez más distancia con Tel-Aviv, Jordania ha dado muestras, desde hace algún tiempo, de un acercamiento al eje de la Resistencia.
La cancelación de un contrato de arrendamiento de 25 años que otorgó a Israel el derecho de explotar unas tierras jordanas con la posibilidad de anexión es una de las pruebas más notorias del deterioro de las relaciones entre Tel Aviv y Ammán. También cabe señalar la luz verde dada por el gobierno jordano al cierre de los campos de entrenamiento terrorista en las fronteras sirias, la no aprobación del contrato de gas entre Tel Aviv y Amman por la Asamblea Nacional de Jordania y, finalmente, la reapertura del punto de cruce de Nassib, que une el norte de Jordania con la provincia siria de Daraa.
Source: Periódicos