En una ceremonia para celebrar el 40 aniversario de la Revolución Islámica en Irán, el secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasralá, revisó los logros y el progreso de Irán después de la revolución en todos los niveles.
“En caso de guerra contra Irán, este país no estará solo. El destino de la región y sus pueblos está ahora vinculado al destino de este gobierno bendito”, dijo Nasralá.
En otro nivel, Sayyed Nasralá dijo que estaba dispuesto a equipar al Ejército libanés con sistemas de defensa antiaérea iraníes para hacer frente a los aviones israelíes que violan el espacio aéreo libanés.
He aquí los principales puntos de su discurso:
En primer lugar, me gustaría agradecerle su participación en el 40º aniversario de la victoria de la Revolución Islámica en Irán. Me gustaría rendir homenaje al Imam Jomeini, el precursor de esta revolución, y a los mártires. Me gustaría felicitar al Imam Jamenei (Líder Supremo de la Revolución Islámica), a todos los líderes de la República Islámica, al pueblo de Irán y a todos aquellos que han apoyado esta revolución durante estos 40 años.
Esta revolución fue una victoria para el Islam, para la Ummah (nación) islámica y para todos los oprimidos del mundo.
Antes de la revolución, Irán estaba gobernado por un Shah. No había libertades, ni atención a las necesidades de la gente. El Irán de Shah era un país vinculado a EEUU. Se hallaban allí unos 40.000 asesores estadounidenses y algunos evocan una cifra de 60.000 norteamericanos que controlaban Irán.
El Shah, que era conocido como “el Policía del Golfo”, permitió que EEUU saqueara los recursos petroleros de Irán y sirvió los intereses de los estadounidenses. También tuvo relaciones estratégicas con Israel y le proporcionó petróleo gratis.
A principios de la década de 1960, un hombre que vivía en Qom, un filósofo, un intelectual, un líder excepcional con un valor absoluto. Él tomó medidas para enfrentarse al Shah, que trazaba planes que hacían depender a Irán aún más de EEUU e Israel.
Irán, un país de peso
Hoy, 40 años después de la victoria de la Revolución Islámica, Irán ocupa el primer lugar en varias áreas entre los países de la región. Es un país de peso que influye en sus desarrollos.
La verdadera independencia es el mayor logro de la Revolución Islámica, una independencia que ha sabido preservar durante 40 años. Irán conservó todo lo que tenía antes de la Revolución; no se destruyeron refinerías ni pozos de petróleo ni bancos, no se destruyeron iglesias ni se hostigó a las minorías religiosas.
Irán ha logrado proteger su unidad a pesar de todos los intentos de EEUU, Occidente y el Reino Unido para sembrar la discordia entre las comunidades árabes y kurdas que viven en Irán.
Teherán no solo logró derrotar a Saddam, quien recibió el apoyo de EEUU, la Unión Soviética y los países del Golfo Pérsico, sino que también se embarcó en un proceso de reconstrucción del país después de la guerra. Además, no se ha exonerado de sus responsabilidades regionales al apoyar a Palestina, el Líbano, Siria y Afganistán.
Comparación entre la era del Shah y la de la República Islámica
Irán de la época del Shah no ocupó ningún lugar en la producción de ciencia, mientras que el Irán de hoy ocupa el primer lugar en la región y el séptimo en el mundo en lo que se refiere a innovaciones y el 16º del mundo en materia de producción de ciencia.
En el momento de la victoria de la Revolución Islámica, este país tenía solo 22 universidades e instituciones científicas, mientras que el número de estas instituciones ahora supera las 3.000.
En 1979, solo 165.000 estudiantes estaban estudiando en las universidades, mientras que ahora hay unos 4.800.000 estudiantes iraníes en la universidad.
Antes de la Revolución, las mujeres constituían solo el 6% de los estudiantes iraníes, mientras que esta cifra ahora es del 75%.
Antes de la Revolución, 5.800 médicos estaban activos, mientras que ahora hay más de 200.000 médicos y sanitarios trabajando en Irán.
Después de EEUU, Irán ocupa el segundo lugar en el campo de la investigación de las células madre.
Las cifras que acabo de anunciar no han sido publicadas por el estado iraní, sino por las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales. Irán ya no necesita importar medicamentos.
Irán ocupa el primer lugar en la región y el 13 en el mundo en matemáticas. Ocupa el puesto 18 en el mundo en términos de estudios de economía y el 90% de sus necesidades defensivas están cubiertas por la industria nacional.
Irán fabrica barcos y aviones de tamaño pequeño y mediano, y ha logrado la autosuficiencia en la generación de energía.
Los logros de la Revolución Islámica
– Derrocar al régimen del Shah.
– Expulsar a EEUU de Irán y a sus asesores, que trabajaban para apropiarse de los recursos iraníes.
– Expulsar a Israel de Irán y reemplazar su embajada con la de Palestina.
– Alcanzar la independencia y la soberanía real.
– Establecer un sistema político sobre la base de la soberanía popular, que es el equivalente a la democracia en nuestra región.
– Desde el primer día, los iraníes celebraron un referéndum sobre la República Islámica y su Constitución.
– Las elecciones y los referendos no se detuvieron ni se pospusieron, incluso cuando Saddam estaba bombardeando Teherán.
– Se impuso una guerra impulsada por EEUU, la Unión Soviética y los países del Golfo contra Irán, que resistió y logró abortar esta trama.
– Irán resistió y no abandonó las causas justas de la región: Palestina, la lucha contra la ocupación del Líbano y la lucha contra la ocupación del vecino Afganistán por la Unión Soviética.
– El Irán del Velayat al Faqih es un país constitucional y soberano y no hay en él un rey o un dictador.
Por otro lado, reconocemos que hay problemas en Irán debido a las sanciones y a ciertas disputas internas.
Oposición a la hegemonía estadounidense y al proyecto sionista
Uno de los logros más importantes de la Revolución Islámica ha sido el de oponerse a la hegemonía estadounidense y al proyecto sionista.
Los musulmanes no habían sido testigos de una tal convergencia y cooperación a lo largo de la historia como la que ha existido desde la Revolución Islámica hasta nuestros días.
El papel de Irán en el apoyo a las fuerzas de resistencia en la región, el Líbano y Palestina y la creación del eje de la resistencia ha sido muy importante. De lo contrario, Israel y EEUU habrían extendido su dominio sobre toda la región. A esto se suma la lucha de Irán contra el terrorismo y el takfirismo y su apoyo a Iraq y Siria frente a la guerra que se les impuso. Esto además de su ayuda a la Resistencia en el Líbano en su lucha contra los takfiris (Daesh y Al Nusra, entre otros).
Sin embargo, la mayoría de los medios de comunicación están difundiendo imágenes oscuras sobre Irán mientras ignoran la situación en algunos países dictatoriales de la región.
Creación del modelo wahabí
Para contrarrestar el modelo islámico de Irán, EEUU pidió a Arabia Saudí que extendiera el wahabismo por el mundo. Esto ha sido reconocido por el príncipe heredero de la Arabia Saudí, sin mencionar la razón. Arabia ha gastado millones de dólares en la promoción del wahabismo, que inspiró al Daesh.
El modelo de la República Islámica de Irán, su desarrollo a todos los niveles, su independencia, su tolerancia disgustan a EEUU. Y ello dio lugar a la creación por parte de EEUU de un modelo salvaje que actúa en nombre del Islam (el Daesh) y que propaga la decapitación, la destrucción, los asesinatos, la tortura…
El Iman Jomeini no abogó por un solo estado islámico, sino que pidió a otros países de la región que preservaran sus fronteras y satisficiera las necesidades de sus pueblos y defendió una unión entre países islámicos similar a la Unión Europea.
Le digo al pueblo árabe que Irán no quiere nada de vosotros, no quiere arrebataros vuestras armas, recursos o dinero, y está dispuesto a compartir con sus vecinos su experiencia en todos los niveles.
Una guerra norteamericana contra Irán
Lo que ha estado ocurriendo durante 40 años hasta el día de hoy es una guerra estadounidense contra la República Islámica de Irán y ella continúa. Arabia y algunos países del Golfo son una simple herramienta en este conflicto como lo fue en su día Saddam.
EEUU está decidido a luchar contra Irán por dos razones:
1- Irán es un estado soberano e independiente que controla su propia riqueza petrolera, humana y material y no está sujeto a los dictados de EEUU.
2- El papel regional de Irán, su apoyo a los oprimidos y su posición hacia Palestina y las fuerzas de resistencia. Cualquiera podría abandonar a Palestina, pero este no es el caso de Irán, que está comprometido con la causa palestina, Al Quds y los lugares sagrados.
Diversas sanciones han sido impuesto contra Irán desde 1979, es decir, antes del nacimiento de Hezbolá, Hamas o el Yihad Islámico de Palestina. El problema de EEUU con Irán es que este último es un país independiente que se niega a ser un policía que trabaje al servicio de Washington.
Las diferentes formas de esta guerra continuarán mientras Irán, su líder, sus gobernantes y su pueblo estén comprometidos con la soberanía y la dignidad del país y su independencia, que es una línea roja.
EEUU terminará sufriendo una derrota como fracasó en la implementación de los proyectos norteamericano-israelíes en 1979.
El conflicto en la región persistirá y adoptará muchas formas. La República Islámica de Irán es hoy uno de los países más poderosos de la región. El eje de la resistencia se ha vuelto más fuerte que nunca. Por otro lado, EEUU se retirará de la región e Israel sufrirá más temor.
En caso de guerra contra Irán, este país no estará solo. El destino de la región y su gente está ahora vinculado al de este gobierno bendito.
La única opción restante que le queda a EEUU es recurrir a sanciones y apostar por divisiones internas. Pero Irán superará estas sanciones. Nosotros también superaremos las dificultades gracias a nuestra voluntad y determinación. El horizonte es el de la victoria de este eje y la derrota del otro proyecto (de EEUU, Israel y algunas monarquías del Golfo).
Dispuesto a ayudar al Ejército libanés
Le está prohibido (por EEUU y sus aliados) al Ejército libanés adquirir armas defensivas. Sin embargo, estoy listo para ayudar al Ejército libanés a ser el más fuerte de la región.
¿Se atreverá el gobierno libanés a aceptar las propuestas iraníes? ¿Por qué debería temer el Líbano a cooperar con Irán?
En la lógica de EEUU está prohibido cooperar con Irán.
Soy amigo de Irán y estoy dispuesto a garantizar que el Ejército libanés reciba sistemas de defensa antiaérea suministrados por Irán que se enfrenten a los aviones que violen el espacio aéreo libanés.
Irán está listo para ayudar al Líbano en todos los niveles. Tenemos un gran amigo que no pide nada a cambio. ¿Por qué ignoramos a un estado amistoso que quiere ayudarnos en el campo de la defensa, el desarrollo, la ciencia y en los foros internacionales?
Source: Al Manar