En los medios israelíes se habla de una infraestructura operativa de Hezbolá en la región del Golán liberado, situado justo al lado del ocupado por Israel.
El Ejército israelí acusó el lunes 13 de marzo en un comunicado al partido de la resistencia libanesa de querer poner un pie en esta región estableciendo una red militar en ella.
“Esto es un testimonio de la determinación del líder de Hezbolá, Hasan Nasralá, de establecer un nuevo frente en la guerra contra Israel”, afirmó el sitio pro-israelí francés Jforum.
Según el sitio, Hezbolá “ha descubierto una necesidad estratégica de construir un frente en los Altos del Golán para reforzar el frente libanés en una próxima guerra contra Israel”.
“Durante los últimos años, el número uno de Hezbolá no ha ocultado su voluntad de que las regiones fronterizas adyacentes con el Golán ocupado se conviertan en un frente de confrontación contra Israel”, señala el sitio.
El sitio cree que el frente del Golán podría servir de plataforma para la realización de operaciones de represalia contra las acciones israelíes.
JForum recuerda que en enero de 2015 aviones de combate israelíes atacaron un convoy de la resistencia matando a seis combatientes, entre ellos Yihad Mugniyeh, hijo del comandante y fundador de la rama militar de Hezbolá, Hay Imad Mugniyeh.
Hezbolá respondió al ataque diez días después con una emboscada contra un convoy militar israelí cerca de las aldeas de Shebaa durante el cual varios vehículos fueron destruidos y un número indeterminado de soldados israelíes murieron y resultaron heridos. Las autoridades israelíes siguen ejerciendo una censura sobre las pérdidas que sufren en tales casos.
Durante uno de sus recientes discursos, Sayyed Hasan Nasralá dijo que estaba contento de que los israelíes vigilen de cerca las actuaciones de la resistencia, porque esto debería disuadirles de lanzar una ofensiva al conocer las pérdidas que podrían sufrir.