Según los expertos, China está tratando de ayudar a sus socios energéticos a los que se aplican las sanciones económicas unilaterales de EEUU. Según los observadores, Pekín también está actuando para protegerse contra la presión de los estadounidenses, escribe el sitio del canal RT.
En enero y marzo de 2019, China aumentó las importaciones de petróleo de Irán y Venezuela en un 78% y 192%, respectivamente.
Como dijo Alexei Maslov, director del Departamento de Estudios Orientales de la Escuela de Economía de Moscú, Pekín es actualmente el mayor acreedor de Caracas. De esta manera, en el contexto de la crisis política y económica en Venezuela, China está tratando de proteger sus inversiones financieras con grandes compras de petróleo.
Según el sitio web de información Tanker Trackers, durante el período de enero a marzo, las importaciones chinas de petróleo iraní a través del mar aumentaron en un 78%, de 431.000 a 767.00 barriles por día. Durante el mismo período, las de Venezuela aumentaron un 192%, de 84.200 a 226.800 barriles por día.
“Teherán sigue siendo uno de los principales suministradores de petróleo de China. Además, las compañías chinas quieren trabajar en los campos petrolíferos y de gas iraníes. Pekín está invirtiendo en algunos proyectos relacionados con el desarrollo de infraestructura de la República Islámica. Como resultado, China está tratando efectivamente de proporcionar apoyo económico a sus socios para compensar las sanciones de EEUU contra estos países”, dijo Natalia Miltchakova, directora adjunta del Centro Analítico Alpari.
Según Alexei Maslov, esta asociación energética activa con Irán y Venezuela también está directamente vinculada a las tensiones en las relaciones entre China y EEUU. Según el experto, incluso si se firmara un acuerdo comercial y se produjera el final de la guerra comercial entre los dos países, Washington continuará presionando a Pekín. Por eso, China está tratando de fortalecer la cooperación con otros socios.
“China importa principalmente petróleo y gas de Rusia, los países del Golfo Pérsico y EEUU. Pero resulta que EEUU puede bloquear el flujo de sus propios hidrocarburos a China y presionar a los países árabes del Golfo Pérsico, como Arabia Saudí o los Emiratos Árabes Unidos, para hacer lo mismo. Por esta razón, Pekín está buscando fuentes de suministro alternativas y dignas de confianza”, dijo Alexei Maslov.
Source: Press TV