Varios miles de personas se manifestaron el sábado en Varsovia contra la ley norteamericana 447 que busca entregar a Israel bienes pertenecientes a judíos muertos durante la Segunda Guerra Mundial y que han pertenecido desde el fin de esta última al Tesoro Público polaco.
La Ley 447 “estipula que el presidente de EEUU debe apoyar reivindicaciones que son ilegales puesto que, en virtud de nuestras leyes, los bienes sin heredero pertenecen al Tesoro Público”, dijo Marek Wawrzyszko, un orador venido de Cracovia.
“Se nos llama agentes rusos, pero esta ley es un regalo a Vladimir Putin”, añadió, prediciendo que ella tendrá un efecto nefasto para las relaciones polaco-estadounidenses.
El movimiento Kukiz 15, que cuenta con 26 diputados en el Parlamento polaco, y una coalición nacionalista creada con vistas a las elecciones al Parlamento Europeo han preparado cada una un proyecto de ley que declara que Polonia se negará a donar bienes que carezcan de heredero.
El partido conservador en el poder en Polonia así como la oposición centrista y liberal han minimizado la importancia de esta ley firmada por Donald Trump en mayo de 2018, señalando que ella no tendrá ningún impacto sobre Polonia.
Como reacción a esta campaña internacional en su contra, el gobierno polaco anunció el lunes 13 de mayo que había anulado una visita de responsables israelíes debido a la intención de estos últimos en plantear el tema de la restitución de bienes de los judíos muertos durante la Segunda Guerra Mundial, un tema ya cerrado para Polonia.
“Polonia decidió cancelar la visita de funcionarios israelíes luego de que la parte israelí anunciara cambios de última hora en la composición de la delegación, sugiriendo que las discusiones se enfocarían principalmente en temas relacionados con el retorno de lo que fueron propiedades de judíos”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Polonia en un comunicado, según AFP.
Según la misma fuente, la delegación israelí, encabezada por Avi Cohen-Scali, director general del Ministerio para la Igualdad Social, era esperada inicialmente en Varsovia para el lunes 13 de mayo.
El año pasado, hubo una crisis entre Israel y Polonia después de la adopción de una ley polaca sobre el Holocausto que penaliza “la atribución a la nación o estado polaco de crímenes contra la humanidad en el contexto de la Segunda Guerra Mundial”. Esta ley buscaba impedir el hostigamiento de la entidad sionista contra los polacos, como ha sucedido anteriormente con otros países europeos, en el contexto del Holocausto. Para Israel, esta ley busca evitar que los sobrevivientes del Holocausto discutan los supuestos crímenes de los polacos contra ellos.
Desde entonces, Polonia es víctima de una campaña que la acusa de “antisemitismo”.
En febrero, el ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, atacó Varsovia con comentarios como que “los polacos maman el antisemitismo con la leche de su madre”. Polonia posteriormente boicoteó una cumbre de cuatro naciones planeada en la ciudad palestina ocupada de Jerusalén en febrero.
Source: Diversas