La entidad sionista ha recibido una invitación oficial para visitar la capital de Bahrein y participar en la organización de una conferencia económica considerada como el primer paso para la implementación del llamado “acuerdo del siglo”, la iniciativa de la administración Trump para poner fin al conflicto israelo-palestino.
Según el canal 13 de televisión israelí, la invitación se envió a través del correo diplomático como parte de un proceso coordinado entre el presidente de EEUU, Donald Trump, y el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu.
La reunión está programada del 25 al 26 de mayo con la participación de ministros de economía y líderes empresariales regionales e internacionales y debería abogar por inversiones en Cisjordania y la Franja de Gaza. Se trata de una maniobra dirigida a resaltar los supuestos “beneficios económicos” del acuerdo antes de revelar las violaciones a los derechos políticos y territoriales que se impondrían a los palestinos.
Un funcionario estadounidense le dijo al canal de televisión estadounidense CNN que esta fase incluye cuatro áreas: infraestructuras, industria, inversiones y reformas gubernamentales.
Los palestinos no fueron consultados
“No fuimos consultados acerca de este taller… ni en su momento, ni en su contenido o su forma”, dijo el primer ministro de la Autoridad Palestina, Mohammad Shtayyeh, que aseguró que sus resultados serán nulos porque los palestinos boicotearán el evento.
Y de acuerdo con la agencia oficial palestina Wafa: “Cualquier solución del conflicto solo podría llevarse a cabo a través de soluciones políticas que pongan fin a la ocupación y restituyan a nuestro pueblo sus derechos que se manifiestan en un estado independiente y viable en las fronteras de 1967 y con su capital en Jerusalén, y en el derecho de retorno de los refugiados. Estos puntos constituyen la base de las resoluciones internacionales legítimas y el derecho internacional”.
Según el Sr. Shtayyeh, la cuestión económica debe ser “el resultado del acuerdo político”.
“Los palestinos y su liderazgo no están tratando de mejorar sus condiciones de vida bajo la ocupación. La crisis financiera de la Autoridad Palestina es el resultado de una guerra económica contra nosotros para hacernos ceder en nuestras posiciones políticas. Pero nunca cambiaremos nuestros derechos nacionales por dinero”, concluyó.
Fuera del consenso árabe
Por su parte, las diversas facciones palestinas expresaron su desaprobación con respecto a la celebración de la reunión económica de Manama.
El movimiento Fatah dijo que el enfoque del régimen de los Al Jalifa “forma parte de su política de normalización con la ocupación”. En este sentido, pidió a dicho régimen que no pase por alto la iniciativa de paz árabe. Para él, las conferencias económicas y políticas que se llevan a cabo fuera del consenso árabe son “inadmisibles”.
Las ilusiones de la administración estadounidense
Inscribiendo esta reunión en la “continuación de las ilusiones de la administración estadounidense”, el movimiento Hamas hizo hincapié en que el pueblo palestino nunca intercambiará sus derechos legítimos por instalaciones y proyectos económicos.
“Hamas se niega a permitir que un estado o protagonista árabe sea el anfitrión de esta conferencia, porque tales actividades incitan a la aprobación de transacciones que usurpan los derechos de nuestra gente”, dijo su portavoz, Hazem Qassem, para el sitio web arabic21.
“La administración Trump está tratando de obtener cierta legitimidad de los estados árabes. Al organizar actividades en su territorio, quiere dar la impresión de que los Estados árabes están de acuerdo con ellas. Esto también debería contribuir a aislar la posición palestina que rechaza el “acuerdo del siglo” al tiempo que respalda las acusaciones de ocupación de que su problema es con los palestinos y no con la nación árabe.
Presionar a los gobiernos
Una posición similar fue expresada el Frente Popular para la Liberación de Palestina, que ha pedido una posición palestina unificada para rechazar esta iniciativa y una acción rápida por parte de las Fuerzas de Liberación Árabes para presionar a sus gobiernos con el fin de impedir que sean arrastrados detrás de la administración estadounidense.
Source: Diverso