El primer ministro de Malasia ha pedido a la comunidad global que ayude a detener el genocidio de los musulmanes rohingyas en Myanmar y criticó a la líder de facto del país, Aung San Suu Kyi, por su inacción contra el derramamiento de sangre que sufre esta comunidad minoritaria.
El jueves, Najib Razak se unió a unos 5.000 malasios que habían salido a las calles de Kuala Lumpur para mostrar su apoyo a la larga y perseguida comunidad rohingya de Myanmar.
“El mundo no puede sentarse y ver como el genocidio tiene lugar”, dijo el primer ministro en un discurso ante la multitud.
Najib pidió además a las Naciones Unidas, al Tribunal Penal Internacional y a la Organización de Cooperación Islámica que intervengan y ayuden a detener la matanza y persecución que sufren los musulmanes rohingyas.
El líder malasio criticó a Suu Kyi por no actuar para remediar los sufrimientos de la comunidad musulmana de Myanmar.
Source: Agencias
