Según muchos analistas, el Hezbolá libanés ha logrado imponer sus reglas de compromiso al régimen israelí después de los incidentes que ocurrieron entre las dos partes durante la última semana de agosto y la captura del dron israelí el 9 de septiembre.
Según Elijah Magnier, “Hezbolá ha ganado en todos los niveles e Israel ha perdido en todos los frentes”. En un artículo con el mismo título, publicado en el sitio web del diario The American Herald Tribune, se explica que la captura por parte de Hezbolá de un dron israelí en el Suburbio del Sur de Beirut será muy costosa para Netanyahu.
El autor escribió: “Los pueblos de Oriente Medio han tenido opiniones diferentes, incluso contradictorias, sobre los enfrentamientos entre Israel y Hezbolá durante la última semana de agosto. Muchos querían ver más soldados israelíes muertos, mientras que otros criticaron las represalias de Hezbolá por la agresión israelí en Beirut, que implicó el ataque de dos drones con explosivos contra el Suburbio del Sur de la capital. Sin embargo, el ataque de Hezbolá contra un vehículo militar israelí marcó un nuevo punto de partida para una ecuación futura entre las dos partes: exigir respeto por las reglas del enfrentamiento, establecer una estrategia de respuestas militares e intercambiar mensajes entendidos por las partes beligerantes.”
Según Elijah Magnier, todos estos eventos son el resultado de la intención del primer ministro israelí de lanzar un nuevo plan de acción que consiste en usar más y más drones contra Irán y sus aliados, incluido Hezbolá. Pero desafortunadamente para Benyamin Netanyahu, la operación de sus drones en el Suburbio del Sur de Beirut fracasó. “Este fallo ha resultado en la introducción de nuevas reglas de enfrentamiento que aparentemente van a durar”.
Magnier añade: “La captura de uno de los drones de Netanyahu por parte de Hezbolá ha establecido un precedente histórico que dificulta que cualquier otro funcionario israelí recurra a la táctica de los drones suicidas contra Hezbolá y otros aliados de Irán. Después de este incidente, los israelíes tendrán que cumplir con las reglas de enfrentamiento evitando atacar los objetivos de Hezbolá a corto y mediano plazo, a menos que quieran comenzar definitivamente una guerra.”
La respuesta de Hezbolá ha sido calculada con mucho cuidado, porque, según el autor, el movimiento libanés no quiere una escalada con Israel.
El autor del artículo agregó: “El ataque de Hezbolá tuvo lugar a plena luz del día y fuera de las granjas ocupadas de Shebaa. En realidad, Hezbolá quería imponer una respuesta estratégica a cualquier posible agresión israelí en el futuro a lo largo de la frontera.”
Magnier señala que Hezbolá obligó al ejército israelí a retirarse de la frontera durante una semana y esconderse detrás de los civiles.
Así, Hezbolá logró imponer nuevas reglas a los israelíes al hacerles comprender que deberían abstenerse de atacar objetivos de Hezbolá, porque ahora las represalias se producirán sin previo aviso. Hezbolá, por lo tanto, impuso nuevos elementos a los israelíes que eran tabú antes de septiembre.
El autor concluye: “Hezbolá ha ganado en todos los niveles, independientemente de la cantidad de víctimas. Israel ha perdido en todos los frentes. El resultado es que el Líbano se ha convertido en un lugar mucho más seguro. Esto costará a Netanyahu mucho más de lo que imaginaba.”
Source: Al Manar