Tras el llamamiento de la “Marjaiya” (Liderazgo religioso shií en Iraq), los iraquíes salieron a las calles de la capital, Bagdad, para denunciar las acciones de los creadores de disturbios y las injerencias de EEUU durante las recientes protestas violentas en todo el país.
Según Bagdad al Yaum, los manifestantes comenzaron su marcha esta mañana jueves 5 de diciembre desde la calle Palestina, al este de la capital, para dirigirse a la emblemática Plaza de Tahrir.
La manifestación del jueves tuvo como objetivo apoyar a la Maryaiya, que había pedido identificar a los infiltrados y separarlos de los manifestantes pacíficos.
Los manifestantes lanzaron consignas hostiles a la interferencia de EEUU e Israel en los asuntos internos de sus países, informó Al Mayadeen TV. “Muerte a EEUU”, se podía leer en las pancartas que blandieron.
El gran clérigo iraquí, el Gran Ayatolá Ali Sistani, llamó a los manifestantes iraquíes a distanciarse de los alborotadores y agentes.
Durante el sermón del viernes 29 de noviembre en la ciudad sagrada de Kerbala, el representante del Ayatolá Sistani, Ahmad al Safi, llamó a los manifestantes iraquíes a separarse de los causantes de disturbios.
Mientras reiteraba el apoyo de Sistani al derecho de los iraquíes a manifestarse, dijo que “los enemigos buscan crear agitación y una guerra civil y traer la dictadura de regreso a Iraq a través de sus mercenarios y agentes”
El representante de Sistani también pidió a los manifestantes que expulsen a los alborotadores y agentes de sus filas y que no les permitan tomar el control de las manifestaciones.
Funcionarios iraquíes dijeron la semana pasada que varios manifestantes con máscaras en sus rostros habían entrado en las provincias de Nayaf y Kerbala para provocar el caos en esas provincias, lo que resultó en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad iraquíes.
El Gran Ayatolá Sayyed Ali Sistani declaró el viernes 6 de diciembre que el nuevo primer ministro sería nombrado sin “interferencia extranjera” después de que EEUU enviara una alta delegación encabezada por el emisario James Jeffrey a Bagdad.
Source: Al Mayadeen