A 38 años después de la huelga general emprendida por los residentes del Golán sirio ocupado en rechazo a los planes de la ocupación israelí, la población en el Golán sigue resistiendo a la ocupación y a sus acciones expansionistas contra sus tierras y propiedades, aferrándose a su identidad árabe siria y confiando en la liberación y el retorno a la patria Siria tarde o temprano.
El 14 de febrero de 1982, la población en el Golán se enfrentó a la decisión de la Knesset israelí de anexionar el Golán ocupado e imponer la jurisdicción israelí a sus residentes, la cual fue aprobada el 14 de diciembre de 1981.
“Morir antes de ser judaizados” fue un eslogan lanzado por los residentes del Golán ocupado en su huelga abierta en rechazo a la imposición de la “identidad israelí” y para afirmar su adhesión a su identidad nacional y a la continuación de su lucha contra las medidas arbitrarias de la ocupación hasta la liberación del Golán y el regreso a la patria siria.
La huelga, que condujo a una parálisis total en varias zonas, fue acompañada por manifestaciones masivas a través de las cuales los ciudadanos del Golán pudieron imponer su voluntad al ocupante, armados con su identidad árabe siria. Hubo enfrentamientos violentos con las fuerzas de ocupación, quienes no dejaron de usar todo tipo de armas para reprimir y poner fin a la huelga.
La batalla de identidad frente a las medidas de ocupación represivas del 1 de abril de 1982 sigue siendo un testigo del heroísmo de la población del Golán para resistir la barbarie del enemigo israelí, cuyas fuerzas asaltaron varias aldeas y reprimieron a su población.
Las fuerzas de ocupación utilizaron todas las herramientas de intimidación contra el pueblo del Golán, impusieron un bloqueo militar total a las localidades, impidieron el acceso a los alimentos y cortaron la electricidad en un intento de obligar a los habitantes a poner fin a la huelga y aceptar sus leyes.
Las fuerzas de ocupación no se detuvieron allí, sino que fueron más allá y confiscaron propiedades de los residentes del Golán, levantaron barreras militares, impidieron que los pacientes acudieran a los hospitales para recibir tratamiento y ejercieron una política de detención arbitraria contra decenas de jóvenes por medio de redadas en viviendas y la imposición de toques de queda.
Esta brutalidad de la ocupación no fue capaz de romper la voluntad de los habitantes del Golán arraigados en sus tierras, y tras más de cinco meses de la huelga el ocupante se rindió a las demandas de la población de retirar los planes para imponer la “identidad israelí” en el Golán.
Las Naciones Unidas a través de la Resolución 497 del Consejo de Seguridad emitida el 17 de diciembre de 1981, y decenas de resoluciones adoptadas por la Asamblea General declararon que la decisión de la ocupación israelí de anexionarse el Golán era nula y que el Golán es territorio sirio ocupado.
Hoy en día, los habitantes del Golán renuevan su compromiso con la identidad nacional aferrándose a sus raíces en su tierra y continúan el camino de la lucha frente a los planes agresivos del ocupante israelí hacia la liberación del Golán sirio ocupado y su regreso a Siria.
Expresan su rechazo categórico a la declaración de Trump, sobre el Golán y las llamadas “elecciones de los consejos locales”. Una prueba de ello es la realización hace unos días de una huelga general de rechazo al plan de ocupación para construir turbinas eólicas en sus tierras agrícolas y confiscar por la fuerza sus propiedades.
Source: SANA