La cancillería de la Autoridad Palestina (AP) condenó el miércoles la inminente construcción de siete mil viviendas para colonos judíos en Efrat, al sur de Al Quds (Jesuralén), aprobada por el ministro de defensa israelí, Naftali Bennett.
Tal decisión constituye un desafío a los preceptos del derecho internacional, insistió el Ministerio de Asuntos Exteriores en una proclama luego de subrayar que el plan dirigido a ampliar un asentamiento ilegal levantado por “Israel” en tierras árabes, desoye sucesivos pronunciamientos de la comunidad internacional, opuesta a la política de usurpación.
Las fuerzas de ocupación aprovechan el momento en que la humanidad lucha contra la pandemia de Covid-19 para llevar a vías de hecho otro de sus proyectos coloniales, amparados en el sesgo total de EEUU a favor de esa estrategia expansionista.
En su protesta la cancillería de la AP responsabilizó a “Israel” por las consecuencias y pidió imponer sanciones contra ese país para obligarlo a desechar su programa usurpador y de anexión.
Con anterioridad la AP rechazó también cualquier acción en consonancia con el “acuerdo del siglo” presentado por EEUU a finales de enero, un documento que concede a Palestina una patria discontinua distribuida entre la casi inhabitable franja de Gaza y la asediada Cisjordania.
Adicionalmente deja en manos de Tel Aviv el control sobre el cotizado valle del Jordán, al tiempo que declara a Jerusalén, reivindicada por ambas partes, como la capital indivisible de “Israel”.
La propuesta enarbolada por el propio presidente estadounidense, Donald Trump, fue rechazada de plano por la Autoridad Palestina, que la calificó de absurda y contraria a los proyectos de arreglo previos, basados en la visión de dos estados con las fronteras anteriores a 1967.
En su comunicado, difundido por la agencia Wafa, la cancillería de la AP exhortó a la Corte Penal Internacional a iniciar una investigación por lo que considera crímenes de la ocupación israelí.
Establecido en 1983, el asentamiento de Efrat está localizado a unos 12 kilómetros al sur de Jerusalén, entre las ciudades de Belén y Hebrón, pertenecientes a Palestina, burlando la línea verde que separa a ese pueblo de Israel.
El proyecto de anexión de partes de Cisjordania está sobre la mesa del nuevo gobierno de unidad pactado entre el primer ministro Benyamin Netanyahu y su rival en las elecciones legislativas Benny Gantz, quienes acordaron gobernar de conjunto tras conseguir un consenso sobre temas considerados claves como la ejecución del “acuerdo del siglo”.
Source: PL