El asesor para asuntos de salud, Mohamed Awad Tag El Din, adelantó que el gobierno egipcio podría imponer medidas más estrictas como un confinamiento total ante una explosión de las infecciones por el SARS-CoV-2, destacó el lunes Ahram.
Egipto no descarta la posibilidad de imponer disposiciones más rigurosas a fin de contener la propagación del nuevo coronavirus si el número de contagios sigue en aumento, manifestó el funcionario.
Según el informe del Ministerio de Salud publicado esta noche, el país norteafricano acumula 9.746 casos de contaminación y 533 decesos desde mediados de febrero, mientras 2.172 pacientes lograron recuperarse y abandonar los hospitales donde recibieron tratamiento.
La salud de los ciudadanos es prioridad, el gobierno evalúa todas las medidas para protegerlos a ellos y también a la economía con un enfoque equilibrado, afirmó Tag El-Din al referirse a recomendaciones del Sindicato de Doctores quienes abogan por imponer un bloqueo total por dos semanas con el objetivo de frenar la diseminación del virus.
Con anterioridad el primer ministro, Mustafa Madbuli, explicó que el ejecutivo planea una reapertura progresiva de la economía una vez finalizado ramadán, o sea, a partir del 23 de mayo, pero advirtió que aplicaría medidas de severidad superior en caso de que la situación epidemiológica así lo requiera.
De momento siguen suspendidos los vuelos internacionales, cerrados colegios, universidades, iglesias, mezquitas, museos, sitios arqueológicos e instalaciones turísticas las cuales agilizan preparativos para una reactivación escalonada bajo nuevas normas.
Aunque no ha impuesto un toque de queda completo, el gobierno sí mantiene uno nocturno desde hace más de un mes y prolongó el estado de emergencia.
Los musulmanes, mayoría en Egipto, viven un ramadán atípico con sus templos clausurados y festividades tradicionales prohibidas, entre ellas los festines culinarios en plena calle para romper el ayuno con la caída del sol.
En tanto la ministra de salud, Hala Zayed, reiteró su llamado a mantener el distanciamiento social y extremar las precauciones en esta etapa que llamó de transición hasta que el gigante árabe de 100 millones de habitantes disponga de una vacuna profiláctica.
En una carrera para salvar vidas, la cartera autorizó los ensayos con la terapia de plasma sanguíneo, consistente en la transferencia de anticuerpos de los ya recuperados a aquellos que luchan por sobrevivir.
Un brote masivo pondría en tensión a la red asistencial, alertó Zayed.
Según el sindicato del sector, al menos 90 profesionales sanitarios están infectados y unos nueve fallecieron a causa de la enfermedad.
Source: PL