La base estadounidense más grande en Siria, una instalación ilegal como todas las otras ya que no cuenta con la autorización del gobierno sirio para su existencia, fue atacada el martes por una serie de obuses de mortero en el este de la gobernación de Deir Ezzor.
Según informes del este de Siria, la base estadounidense situada junto al campos petrolífero de Conoco fue atacada con varios obuses disparados por un grupo desconocido en el campo de Deir Ezzor.
Este ataque contra la base podría ser una represalia por la muerte de un soldado sirio cerca de a ciudad de Qamishli en una acción de un helicóptero Apache estadounidense después de que el Ejército sirio bloqueara el paso a un convoy de EEUU y se produjeran algunos disparos, según algunos testigos.
Avia.pro también señaló que el miércoles 19 de agosto se produjo un nuevo choque entre militares sirios y fuerzas estadounidenses también en Qamishli, no lejos de un punto de control norteamericano.
Un poco más al sur se encuentra la base atacada adonde el CentCom envía regularmente material militar y logístico. La presencia de petróleo es solo un pretexto para mantener una presencia militar en una provincia altamente estratégica como Deir Ezzor, fronteriza con Iraq y por donde discurre la ruta Irán-Iraq-Siria-Mediterráneo, y que cuenta con una fuerte presencia militar siria y del eje de la resistencia.
El Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, una entidad opositora siria con sede en Londres, dijo que “se trata del primer ataque contra una de las 12 instalaciones militares creadas por EEUU desde 2015 en el noroeste de Siria”.
Recientemente, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) y la Tribu Al Akidat se enfrentaron a lo largo de la orilla oriental del Río Éufrates en una serie de choques que llevaron a varias tribus a involucrarse en las hostilidades.
Entre las tribus implicadas en los enfrentamientos contra la coalición liderada por EEUU y las FDS se encuentra la tribu Al Baggara, que afirmó que sus fuerzas expulsaron a las Fuerzas Democráticas Sirias de la aldea de Yadid Baggara, en el este de Deir Ezzor, el fin de semana pasado.
Esta guerra de liberación anti-estadounidense organizada por las tribus de Deir Ezzor podría recrudecerse en las próximas semanas. En el vecino Iraq los ataques contra convoyes estadounidenses se han incrementado también en las pasadas semanas.
Source: Diversas