El ministro de Asuntos Exteriores del gobierno interino libanés, Charbel Wehbé, afirmó que “el Líbano no renunciará a sus derechos. Que las negociaciones indirectas sobre la demarcación de las fronteras marítimas entre el Líbano e “Israel” duren 10 años, o incluso 20 años”.
En una intervención televisada, el ministro Wehbé abogó además por “el diálogo y el entendimiento para lograr la formación de un nuevo gobierno, que es un asunto interno libanés”.
Las negociaciones indirectas entre el Líbano e “Israel”, iniciadas en octubre a través de la ONU y EEUU, se planificaron inicialmente sobre un área marítima de 860 kilómetros cuadrados, según un mapa registrado en la ONU en 2011. “Israel” reclamó casi la mitad del área, ubicada en el bloque 9.
La exploración de este último y de un segundo bloque fue confiada en 2018 por el Líbano a un consorcio internacional formado por el grupo francés Total, el italiano ENI y el ruso Novatek.
Pero después de revisar los mapas, Beirut descubrió que estaban mal y reclamó un área adicional de 1.430 km2 más al sur, que se extiende a parte del campo de gas de Karish, que Israel ha confiado a la empresa griega Energean.
La demanda libanesa despertó la ira de la entidad sionista y de EEUU. Desde entonces, este último han ejercido presión sobre el Líbano para que renuncie a sus derechos. De lo contrario, el Líbano, en crisis, estará sujeto a sanciones estadounidenses adicionales. El Líbano, sin embargo, no ha dado señales de que piense renunciar a sus derechos.
Source: Al Manar