Por primera vez, y después de una interrupción prolongada en la comunicación a alto nivel, Arabia Saudí e Irán iniciaron un diálogo estratégico rodeado de estricto secreto, en el que han tratado todos los temas de contencioso entre ambos. Un diálogo cuyos resultados se espera constituyan un importante punto de inflexión en la región y puedan contribuir a resolver los diversos puntos conflictivos de la región, especialmente el Líbano y Yemen.
Se asumió, según un acuerdo entre los saudíes, los iraníes e iraquíes, que la noticia del primer encuentro directo en mucho tiempo entre Riad y Teherán permanecería confidencial, debido a muchas consideraciones iraníes y saudíes. Sin embargo, una filtración en la prensa británica, concretamente el Financial Times, violó el acuerdo, por lo que las dos partes se apresuraron negar el asunto, como confirmación de las buenas intenciones y para evitar el impacto de la filtración. Pero fuentes iraquíes bien informadas confirmaron a Al Akhbar la validez del contenido de la filtración sobre la reunión, que había sido cuidadosamente preparada por Baghdad, que lidera la mediación, específicamente en la persona de su primer ministro, Mustafa Al Kadhimi.
Dos delegaciones de alto rango, representantes de los liderazgos de los dos países y de las distintas instituciones y agencias en ellos, se reunieron en el palacio presidencial en la Zona Verde en el centro de Bagdad, y en su mesa estuvieron todos los expedientes pendientes, incluyendo las relaciones bilaterales o temas regionales como Yemen y Líbano. La delegación saudí incluía a 6 personas, incluido Jalid bin Ali Al Humaidan, el jefe de la Inteligencia. En cuanto a la delegación iraní, estaba formada por 5 personas y encabezada por un alto funcionario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, e incluía representantes de todas las agencias iraníes, incluidos el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica y la Fuerza Al Quds afiliada al anterior. Las fuentes enfatizaron que el trabajo de la delegación iraní cuenta con la bendición y supervisión del Líder Supremo en Irán, Ali Jamenei.
En cuanto a los resultados de la reunión, la información de Al Akhbar indica que la reunión fue “muy positiva” y superó algunas expectativas. Los saudíes e iraníes decidieron realizar una segunda reunión, también en Bagdad, para la que se concretó una fecha, la semana que viene, y ella pasó a estar en la agenda de Bagdad y las dos delegaciones.
Fuentes de Al Akhbar dijeron que los iraníes han puesto a sus aliados en la región al corriente de las conversaciones, y que Teherán tiene una estimación preliminar de que el camino es “positivo y prometedor”, especialmente cuando se percibe el interés de Riad por reducir la tensión en la región del Golfo Pérsico.
Source: Al Akhbar
