Miles de sirios se dirigieron a los colegios electorales ya en la madrugada del miércoles para votar en una elección presidencial programada para enviar un fuerte mensaje a las potencias occidentales.
La votación es la segunda elección presidencial desde que comenzó el conflicto en el país hace 10 años.
Además del presidente Bashar Al Assad, otros dos candidatos se postulan para el puesto más alto del país, Abdulá Salum Abdulá y Mahmud Ahmad Marie, un conocido opositor.
A partir de las 7 a.m., miles comenzaron a llegar a los colegios electorales en Damasco, llena de calles adornadas con carteles gigantes de Assad y pancartas alabando su gobierno.
“Elegimos el futuro. Elegimos a Bashar al Assad”, decía una de las miles de pancartas levantadas en la capital, Damasco.
“Estoy aquí para votar porque es un deber nacional elegir un presidente que nos guíe en el próximo período”, dijo el funcionario Muhannad Helou, de 38 años, quien dijo que votó por Assad.
Se espera que Al Assad gane otro mandato en el cargo considerando su abrumadora popularidad en todo el país.
Algunas pequeñas partes de Siria no participarán en la votación ya que actualmente están ocupadas por fuerzas estadounidenses y turcas.
Sin embargo, estas elecciones envían un fuerte mensaje a Occidente, ya que muestran que Siria ha tenido éxito en su lucha de una década contra la guerra híbrida de terror que se ha librado contra ella, escribió Andrew Korybko, un analista político estadounidense con sede en Moscú.
“En realidad, la guerra siempre tuvo que ver con la geopolítica. La República Árabe Siria ha practicado con orgullo una política exterior independiente durante décadas, que amenazaba los intereses de EEUU en la región. También se asienta sobre rutas energéticas potencialmente atractivas, sin mencionar que nunca firmó un tratado de paz con “Israel”, ni siquiera reconoce su legitimidad”, escribió en un artículo publicado por el servicio de noticias CGTN con sede en Pekín.
Source: Agencias
