Los activistas de derechos humanos acusaron a Boris Johnson de “alimentar la represión” al reunirse con el príncipe heredero y primer ministro de Bahrein, Salman bin Hamad al Jalifa, mientras el pequeño reino del Golfo recurre a la tortura para reprimir a la oposición.
Johnson está acusado de hacer que el comercio prevalezca sobre la tortura después de reunirse con altos funcionarios de Bahrein en Downing Street para discutir un acuerdo de libre comercio con los estados del Golfo.
El político liberal-demócrata británico Paul Scriven dijo que estaba “consternado pero no sorprendido de que el primer ministro haya desplegado la alfombra roja y haya enfatizado los temas comerciales en lugar de hablar de la tortura en su reunión con el príncipe heredero. El comunicado de prensa oficial no menciona tampoco las violaciones de derechos humanos en Bahrein”.
El director del Instituto Bahreiní para los Derechos y la Democracia (Bird), Ahmed Alwadaei, dijo que: “Si Gran Bretaña realmente busca un acuerdo de libre comercio con un régimen que mantiene como rehenes a prisioneros políticos, tortura a niños y encarcela a cualquiera que exprese críticas moderadas al régimen, será imperativo exigir que las cuestiones de derechos humanos estén en el centro de cualquier relación comercial futura”.
“El gobierno del Reino Unido a menudo hace alarde de lo orgulloso que está de su asociación con Bahrein. Entonces, ¿por qué está haciendo que el príncipe heredero de Bahrein entre por la puerta trasera sin anunciar la visita?”, se preguntó Jeed Basyouni de la ONG Reprieve.
“La verdad es que los funcionarios del gobierno británico saben que las autoridades de Bahrein utilizan sistemáticamente la tortura y la pena de muerte para reprimir a la oposición y, a pesar de ello, el Reino Unido brinda un apoyo generoso a las partes involucradas en estos abusos. Este apoyo está en desacuerdo con los valores británicos y debería retirarse hasta que el gobierno de Bahrein cese las prácticas de tortura y las condenas a muerte de los presos políticos”.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos dijo a principios de este año que Bahrein estaba “violando el derecho internacional” por el maltrato a los presos políticos. El régimen está implicado en la tortura y violación de menores detenidos, añadió.
Los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) son el socio comercial más grande de Gran Bretaña, con un volumen de comercio bilateral en 2019 que asciende a 45.000 millones de libras.
Source: Agencias