Un alto funcionario ruso dice que el objetivo final de las fuerzas externas al alimentar los disturbios postelectorales en Bielorrusia es el cambio de régimen, luego de que Minsk insinuara tener evidencias “irrefutables” de la participación de EEUU en un complot golpista en el país europeo.
El jefe del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolai Patrushev, hizo el comentario después de una reunión con el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, en Minsk, la capital de Bielorrusia, el martes.
“Su objetivo final (de las fuerzas externas) es cambiar la estructura y el poder en Bielorrusia. Hemos sido testigos de esto últimamente”, dijo Patrushev.
El funcionario ruso dijo que había discutido con el líder bielorruso la estabilidad global y regional, la cooperación bilateral y numerosos desafíos de seguridad que amenazan a la región.
“Nuestras evaluaciones no solo son cercanas, sino que coinciden plenamente. Sin lugar a dudas, nos estamos uniendo, uniremos nuestros esfuerzos y actuaremos de manera conjunta frente a estos desafíos y amenazas”, enfatizó.
Patrushev también expresó su preocupación por las actividades sospechosas de algunas ONG que operan en Bielorrusia.
“Hablé sobre los temas de seguridad e información. Y es necesario prestar atención a las ONGs y su actividad. Aunque dicen que son independientes, este no es el caso”, dijo Patrushev. “Es necesario ver de dónde obtienen sus fondos, ante quién deben rendir cuentas y cómo se gastan estos recursos”.
Hizo hincapié en la necesidad del intercambio de información entre los organismos encargados de hacer cumplir la ley y los servicios de seguridad de Rusia y Bielorrusia para abordar estos problemas.
El ministro de Defensa de Bielorrusia, Viktor Khrenin, dijo el miércoles pasado que los investigadores bielorrusos ahora sabían que las agencias gubernamentales estadounidenses habían estado involucradas en los preparativos para un golpe de estado en Bielorrusia.
En abril, el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, dijo que se había frustrado un intento de golpe de estado y de asesinato contra él y su familia. Dijo que servicios de inteligencia extranjeros, muy probablemente “la CIA”, habían estado involucrados.
Lukashenko ganó un sexto mandato en una elección presidencial en agosto de 2020. Su principal rival político, Sviatlana Tsijanuskaya, protestó por el resultado, alegando que había habido fraude electoral. Los gobiernos occidentales rápidamente se manifestaron en su apoyo, repitiendo las acusaciones de manipulación de votos.
Source: Agencias