El gobierno palestino denunció ante la ONU el incremento de los ataques del “ejército israelí” y los colonos contra los habitantes de la ocupada Cisjordania, reportó este jueves la agencia oficial de noticias Wafa.
El medio de prensa citó extractos de una carta enviada por el representante permanente palestino ante el organismo internacional, Riyad Mansur, quien condenó “la violencia y el terrorismo” cometido contra su pueblo.
En la misiva enviada al secretario general de la ONU, y a los presidentes del Consejo de Seguridad y de la Asamblea General, Mansur destacó que solo en la aldea de Burqua resultaron heridos 125 palestinos por la represión ejercida por las fuerzas de Tel Aviv el 23 de diciembre.
También denunció la reciente muerte de una mujer de 63 años, atropellada por un colono judío.
Asimismo, condenó las detenciones arbitrarias, la expulsión de familias y demolición de viviendas tanto en Cisjordania como en Jerusalén oriental con el objetivo de cambiar su demografía, lo cual advirtió, viola las normas internacionales.
En ese sentido, resaltó que hace tres días las tropas del vecino Estado demolieron una vivienda en esa parte de la ciudad, ocupada desde 1967.
Recordó que más de cuatro mil 500 palestinos se encuentran encerrados en cárceles israelíes, donde “son sometidos a maltratos psicológicos y físicos”.
Hace dos días, el ministro israelí de Seguridad Pública, Omer Barlev, reveló que recibió protección ininterrumpida tras las amenazas de muerte de sectores ultraderechistas y colonos después de criticar la violencia de estos últimos contra los palestinos.
“A partir de esta mañana, estoy bajo vigilancia las 24 horas, los siete días de la semana (…) No me amenazan criminales árabes, me amenazan los judíos israelíes”, escribió en Twitter.
Barlev condenó la pasada semana la violencia de los colonos en las zonas ocupadas durante un encuentro con la subsecretaria de Estado norteamericana para Asuntos Políticos, Victoria Nuland.
En respuesta, los sectores de derecha en el poder y en la oposición, encabezados por el Likud, arremetieron contra el funcionario.
El propio primer ministro Naftali Bennett salió en defensa de los colonos al calificar de fenómeno marginal los ataques de estos contra los palestinos, lo cual a su vez, fue duramente cuestionado por la izquierda, los árabes-israelíes y diversas organizaciones de derechos humanos.
Source: PL