El rublo pudo compensar su caída del 30% en la cotización del pasado miércoles, y las medidas del Banco Central de Rusia y del Ministerio de Economía parecen haber dado sus frutos. Si bien el rublo había caído un 30% en los últimos días, de 91 rublos frente al dólar a 118 rublos frente al dólar, ahora ha compensado una parte importante de su caída, situándose en torno a los 97 rublos frente al dólar. Los países occidentales y sus aliados adoptaron el domingo y el lunes medidas punitivas contra el Banco Central ruso y algunos de sus afiliados, lo que provocó la caída del rublo en las operaciones del miércoles.
El banco ruso Promsvyaz anunció que el rublo se mantendrá por debajo de los 100 en su cotización frente al dólar, marcando una primera victoria.
Por cierto, Moscú ya se había preparado para una probable guerra financiera con Occidente, de ahí la calma olímpica mostrada por Moscú. El experto iraní en economía internacional, Atta Bahrami, señala: “Hace unos años, Rusia y China crearon su propia red de transferencia de información financiera para reemplazar al SWIFT. Aunque todavía es débil, entre 40 y 50 países son ya miembros de esta red. Por supuesto, Pekín y Moscú han seguido utilizando el sistema SWIFT, pero han hecho previsiones por si se veían obligados a salir de él. En la situación actual, quieren implementar su idea y su plan para desarrollar estructuras financieras comunes”.
Rusia ahora tiene la intención de expandir su sistema SPFS a nivel internacional debido a las sanciones, y los países que tengan la intención de comprar petróleo y gas de Rusia probablemente tendrán que unirse al nuevo sistema bancario ruso. China también creó un “sistema de pago interbancario transfronterizo” (CIPS) en 2015, que es la versión china del SWIFT. El economista iraní dice que impedir que Rusia acceda al SWIFT podría tener el efecto contrario al que pretenden los que propician tal medida. Muchos países; aquellos que comercian con Rusia se verían obligados a utilizar los sistemas de reemplazo del SWIFT (SPFS o CIPS) para continuar este comercio.
El ministro de Finanzas de Rusia dijo que si se corta el SWIFT, el país recurriría otros sistemas financieros y que Moscú podría soportar cualquier restricción gracias a sus vastas reservas de oro y divisas. Las reservas de divisas y oro de Rusia se han duplicado en los últimos seis años hasta alcanzar más de 600.000 millones de dólares.
Por cierto, el Banco Central ruso duplicó el lunes sus tasas de interés, tomando otras medidas necesarias para fortalecer el rublo frente al dólar. Otra medida importante, aparentemente basada en las lecciones aprendidas de la experiencia contra las sanciones anti-iraníes, es que el Ministerio de Economía de Rusia ha pedido a los exportadores rusos que conviertan sus monedas extranjeras en rublos. Esto no debería agradar a los sancionadores estadounidenses/europeos que ya están pensando cómo explicar a su respectivas opiniones públicas la subida de los precios de los artículos de primera necesidad, ya que Europa y EEUU están entre los principales clientes de los productos y la energía rusa.
El hecho es que EEUU ha buscado expandir la OTAN hasta las fronteras de Rusia y luego imponer sanciones a los rusos para quebrarlos económicamente y luego de hacer lo mismo con China, pero esto está demostrando ser un escenario fallido y mal diseñado.
Por cierto, en reacción a las sanciones contra Rusia, la eliminación de Rusia del sistema SWIFT, entre otros, la Organización de Cooperación de Shanghái (SCO) se convertirá en una organización contra las sanciones. Un espacio fuerte de 3.000 millones de almas con reservas incalculables de petróleo y gas. Luego, los países africanos tienen buenas relaciones con China y Rusia, y otros países, como Brasil, no han condenado la guerra de Rusia contra Ucrania. Irán y China se abstuvieron de cualquier condena. En Iraq, en el Líbano y en Yemen, la Resistencia es literalmente antiestadounidense.
Sea como fuere, el endurecimiento de las sanciones occidentales contra Rusia sería una buena oportunidad para que Irán satisfaga parte de sus necesidades aumentando sus exportaciones y firmando un acuerdo de cooperación a largo plazo con Rusia. Por cierto, el respaldo de Irán a los reemplazos ruso y chino del SWIFT puede ser un paso gigante hacia la expansión de las relaciones comerciales con estos países. El economista iraní finalmente concluye que “las sanciones estadounidenses contra Irán y el establecimiento del paquete de sanciones ofrecen la oportunidad para que los países se opongan al unilateralismo y las sanciones occidentales mediante la creación de acuerdos monetarios y bancarios bilaterales y quizás una moneda única en el futuro”.
Source: Press TV