EEUU afirmó, el lunes 21 de marzo, estar “preparado para tomar decisiones difíciles” para salvar el acuerdo destinado a garantizar el carácter pacífico del programa nuclear iraní, al tiempo que subrayó que también se prepara para un posible fracaso de las negociaciones.
Francia, co-signataria del acuerdo, insistió por su parte en la “urgencia” de su conclusión debido a los importantes avances en el programa nuclear iraní.
Según una fuente cercana al caso citada por AFP, Teherán exige la eliminación del Cuerpo de Guardias de la Revolución Islámica -el ejército ideológico de la República Islámica de Irán- de la lista negra estadounidense de “organizaciones terroristas extranjeras”, y esta petición sería uno de los últimos obstáculos a un compromiso para resucitar este acuerdo de 2015.
Preguntado al respecto, el portavoz de la diplomacia estadounidense Ned Price se negó a detallar “qué sanciones estamos dispuestos o no a levantar”.
Pero “estamos listos para tomar decisiones difíciles para que el programa nuclear de Irán vuelva a estar dentro de sus límites” establecidos por el acuerdo de Viena de 2015, dijo, mientras “Israel” y la derecha estadounidense dan la voz de alarma sobre la eliminación del CGRI de esta lista negra muy simbólica.
“Progreso significativo”
El acuerdo nuclear con Irán había levantado las sanciones económicas contra Irán a cambio de claras restricciones a sus actividades nucleares para garantizar, bajo supervisión internacional, que siguieran siendo estrictamente civiles y pacíficas. Pero bajo la presidencia de Donald Trump, EEUU abandonó el acuerdo en 2018 y restableció sus sanciones.
En respuesta, Teherán se ha liberado de límites clave de su programa atómico.
“Ha habido avances significativos en las últimas semanas, pero quiero dejar claro que un acuerdo no es inminente ni seguro”, dijo Ned Price, como para atemperar el optimismo que había reinado desde principios de marzo entre los negociadores.
Ned Price aclaró que el negociador estadounidense Rob Malley aún no ha regresado a Viena desde la pausa decidida hace diez días en las conversaciones.
“En el pasado, hemos visto que los negociadores iraníes solían tomarse un descanso durante las vacaciones del Nouruz”, el Año Nuevo iraní celebrado el domingo, agregó el portavoz, sin poder precisar cuándo se reanudarían las discusiones.
Durante una entrevista telefónica con su homólogo estadounidense, Antony Blinken, el jefe de la diplomacia francesa, Jean-Yves Le Drian, por su parte, “mencionó la urgencia de finalizar las discusiones sobre el acuerdo de Viena sin demora”.
Source: AFP