El secretario general adjunto de Hezbolá, Sheij Naim Qassem, dijo que los embajadores árabes que regresaron al Líbano la semana pasada se dieron cuenta de que su ausencia era inútil para presionar a Hezbolá.
En una entrevista con la estación de radio Al-Nur el jueves, Sheij Qassem dijo que las sanciones de EEUU han impedido que el Líbano se vuelva hacia el Este, y señaló que las reformas fundamentales deben basarse en el plan de recuperación y en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Queremos lograr reformas financieras, políticas y sociales para poder avanzar. El Líbano puede lograr ese progreso ya que tiene capacidades importantes, especialmente si el plan de recuperación pone la carga del lado responsable de las pérdidas, que son los bancos”.
“Nuestro proyecto es compartir la responsabilidad con todas las partes y formar un gobierno de unidad nacional”, dijo Sheij Qassem a la estación de radio Al-Nur, y enfatizó que Hezbolá no tiene intención de “cambiar el establishment” en el Líbano.
Al comentar el regreso de los enviados saudí, kuwaití y yemení al Líbano, Sheij Qassem dijo que esos embajadores “son los que deberían hablar sobre las razones de su regreso”.
“Los enviados que regresaron se dieron cuenta de que su ausencia no presionaría a Hezbolá, sino que les impediría implementar las políticas de sus países”.
Source: Al Manar