Las autoridades israelíes han demolido seis casas en Jericó, en la Cisjordania ocupada, una continuación de lo que los defensores de los derechos humanos denuncian como la política del régimen de despojo y limpieza étnica de los palestinos.
Las fuerzas del régimen allanaron la región el miércoles y arrasaron seis estructuras residenciales con excavadoras, informaron los medios palestinos.
De manera similar, el martes, las excavadoras militares israelíes demolieron dos casas pertenecientes a los presos palestinos, Yusef Aasi y Yahya Miri, a quienes el régimen acusó de matar a un colono en la aldea de Qarawat Bani Hasan, en Cisjordania, en abril.
El mismo día, las fuerzas israelíes demolieron un café en el norte de los territorios ocupados y arrasaron una casa en construcción en un pueblo al suroeste de la ciudad de Yenín.
La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) dice que las autoridades israelíes confiscaron grandes extensiones de tierra y demolieron más de 50 estructuras de propiedad palestina en Cisjordania ocupada entre el 28 de junio y el 18 de julio.
La OCHA dijo en su informe quincenal de “Protección de civiles” que unas 47 de las estructuras seleccionadas fueron demolidas en el Área C, que constituye el 61 por ciento de Cisjordania y ha sido designada como “zonas de tiro” para el entrenamiento militar israelí.
Se demolieron cuatro estructuras en Jerusalén Este, incluida una casa que fue destruida por sus propietarios que llevaron a cabo la demolición para evitar pagar las multas impuestas por las autoridades israelíes.
La OCHA también dijo que en cuatro ocasiones las fuerzas israelíes realizaron ejercicios de entrenamiento militar cerca de 13 comunidades de pastores palestinos en el área de Masafer Yatta, al sur de al-Jalil. Los simulacros restringieron el acceso de los palestinos a los servicios básicos y pusieron en riesgo su seguridad, desplazando a 40 personas, incluidos 21 niños, y los medios de subsistencia de otras 500 personas.
Source: Agencias