Abdul Yalil al-Miqdad, un preso político y destacado clérigo chií, ha sido agredido en la notoria prisión Jau de Bahrein cuando se dirigía a una cita médica, mientras el régimen de Manamá sigue hostigando a los disidentes políticos encarcelados.
Miqdad, de 62 años, es el fundador de un grupo político de oposición chií en Bahrein. Ha estado en prisión durante 11 años y cumple cadena perpetua por su papel en el levantamiento de 2011.
Debía ser trasladado fuera de la notoria prisión de Jau el martes para una cita médica externa. Aún así, antes del traslado le dijeron que no estaría presente un médico, relató Miqdad en una conversación telefónica con Sayyed Ahmed al-Wadai, director del Instituto de Bahrein para los Derechos y la Democracia (Bird).
Dijo que no asistiría a la cita si no había médicos, por lo que un funcionario de prisiones le pidió que firmara una declaración en la que declaraba que rechazaba el tratamiento médico, pero Miqdad se negó.
Su negativa a firmar la declaración fue recibida con una agresión, le dijo al grupo de derechos, y agregó que un grupo de oficiales intentó golpearlo mientras abusaba verbalmente de él.
Otros agentes intervinieron y detuvieron la agresión física antes de que lo devolvieran a su celda, dijo.
“Este es un intento de asalto violento sin ninguna exageración”, dijo Miqdad. “La razón es la venganza, la agresión, la injusticia”.
Source: PL