Las tropas ucranianas se retiraron en la región de Jerson a Novaya Kamenka.
Como resultado del ataque fallido del ejército ucraniano, las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania y los mercenarios extranjeros tuvieron que retirarse al menos cuatro kilómetros de la “zona gris”.
Por el momento, se sabe que cuando el ejército ucraniano intentó lanzar un contraataque contra los asentamientos de Pyatijatki, Sujanovo y Chervony Yar, este último no solo terminó en un fracaso para las Fuerzas Armadas de Ucrania y los mercenarios, sino que también provocó un fuerte retirada de las fuerzas ucranianas, hasta las afueras del asentamiento Novaya Kamenka.
A juzgar por la actividad de las tropas ucranianas, en este momento puede intentarse un nuevo contraataque en esta dirección. Sin embargo, según el autoridades de la región de Jerson, la situación en el frente es estable.
La noche anterior, se supo que las tropas ucranianas tuvieron que retirarse de Nevskoye en el territorio de la región de Lugansk. El ejército ruso expulsó a las tropas ucranianas de la localidad.
Según los datos disponibles para los periodistas de Avia.pro, el ejército ucraniano, que había ocupado previamente el asentamiento de Nevskoye, se vio obligado a abandonarlo bajo la presión del ejército ruso. Según fuentes ucranianas, la localidad será ocupada por tropas rusas en las próximas horas.
Después de la retirada de las tropas ucranianas de esta dirección, el riesgo de un ataque del ejército ucraniano en la carretera que conecta Svatovo y Kremennaya se ha reducido.
El creciente número de informes sobre los éxitos del ejército ruso en ausencia todavía de las reservas rusas recientemente movilizadas en el frente indica el agotamiento gradual de las Fuerzas Armadas Ucranianas. Los ataques actuales de drones y misiles contra las instalaciones energéticas solo pueden incrementar los éxitos rusos.
Por otro lado, el diario estadounidense The Washington Post ha publicado un artículo donde se refiere al estado actual del ejército ucraniano.
El artículo señala que el ejército ucraniano ha estado en el frente durante ocho meses sin rotación y descanso. Los continuos ataques aéreos y de artillería rusos y las noticias de la actual movilización en Rusia están causando una caída en la moral en las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania, donde se nota ya el efecto de las enormes bajas y comienza a haber una escasez de personal experimentado y cualificado.
El artículo afirma que muchas unidades de las FAU están abrumadas por una ola de desmoralización y que “hay demasiadas bajas”.
Los soldados ucranianos creen que en el futuro la situación en el frente solo empeorará porque pronto las unidades rusas procedentes de la reserva llegarán al frente con la necesaria experiencia de combate y el invierno empezará en breve en Ucrania.
Source: Diversas