Cientos de pueblos en el campo occidental de Deir Ezzor, en Siria, que están bajo el control del grupo “Fuerzas Democráticas Sirias” (FDS), salieron a las calles para protestar contra las prácticas de la “administración autónoma” y el deterioro de la situación humanitaria y de vida en la región.
Las manifestaciones tuvieron lugar en las aldeas de Muhaimida, Hawaiy Diab, Hawaijy Abu Masaa, Al-Kabir, Al-Harmushiya, Al-Kasra y Umm Madfa, con pancartas que denunciaban la “administración autónoma” intercaladas con bloqueos de carreteras con neumáticos incendiados.
Los participantes en las manifestaciones plantearon demandas para combatir “la corrupción rampante en las instituciones de la administración autónoma, la provisión de combustible, agua y electricidad, la creación de oportunidades laborales para los jóvenes, de manera que se frene la fuerte ola de emigración en la región, y el apoyo a la agricultura”.
A su vez, un gran número de docentes continuaron su huelga en la parte de Deir Ezzor que está bajo el control de las FDS en protesta por los bajos salarios y la falta de infraestructura escolar en la zona.
Paralelamente, la ciudad de Manbij en el campo nororiental de Alepo, que también está bajo el control de las FDS, fue testigo de una huelga de maestros y conductores de vehículos de servicio en la ciudad para protestar contra la situación de vida y exigir un aumento de salarios.
Los vecinos acusan a los “gobiernos locales” de la “administración autónoma” de corrupción y de apropiarse de la ayuda de los organismos internacionales.
El gobierno sirio acusa a la “administración autónoma” de vender, robar y contrabandear combustible y trigo, mientras que el pueblo considera que los ingresos económicos resultantes no se reflejan en la región y ni siquiera en los trabajadores de la “administración autónoma”, cuyos salarios no superan los 60 dólares.
Source: Al Mayadeen