El caso de la muerte de cuatro pasajeros después de que un barco que los transportaba y otros 17 pasajeros naufragaran en un lago en el norte de Italia hace unos días sigue atrayendo el interés de analistas y medios internacionales, especialmente después de que se reveló que todos los pasajeros están vinculados a los servicios de inteligencia italianos e israelíes.
Y ante las crecientes especulaciones sobre la naturaleza del viaje, una fuente policial que trabaja en la investigación confirmó el jueves al diario The Guardian que “8 de los 21 pasajeros del barco actualmente sirven o han servido en los servicios de inteligencia italianos, y los otros 13 tenían relaciones con “Israel”.”
Mientras las autoridades luchan por hacer un seguimiento de las reservas de hotel de los pasajeros cinco días después de que su barco de 16 metros, el Godoria, se hundiera en el lago Maggiore, continúan aumentando las especulaciones sobre lo que hacían sus pasajeros en ese rincón del norte de Italia.
The Guardian informó que “dos de las víctimas, Claudio Alones y Tiziana Barnobi, trabajaban para la inteligencia italiana, mientras que el tercero era un agente retirado del Mossad, y la cuarta, Ania Bojkova, era de Rusia y conducía el barco con su marido italiano, Claudio Carminati, capitán del barco.”
Los artículos de la prensa italiana afirmaban que el grupo “se reunía por motivos profesionales, para intercambiar información y documentos, y se quedaban unos días más para divertirse”.
Según una de las hipótesis reportadas por el diario italiano Corriere della Sella, “los agentes se encontraban en el lago Maggiore para espiar a empresarios rusos, quienes presuntamente compraron villas y hoteles en la zona, eludiendo las sanciones financieras impuestas por la Unión Europea a Rusia, transfiriendo dinero a Italia desde cuentas bancarias suizas”.
En otra teoría, el diario plantea la posibilidad de que “agentes israelíes estuvieran monitoreando las comunicaciones entre empresas iraníes y empresas italianas ubicadas en la zona industrial de Lombardía”.
El incidente se produce solo dos meses después de que el primer ministro Benjamin Netanyahu visitara Roma para consolidar los lazos con la administración de extrema derecha de la primera ministra Georgia Meloni, con los dos países ya intercambiando equipo militar.
En detalle, Carminati y Bojkova no sabían nadar, tenían un negocio llamado Love Lake y brindaban un servicio de “barco y desayuno” al Godoria, que solo tiene capacidad para 15 pasajeros.
El grupo abordó la embarcación, que estaba registrada en los Países Bajos, en el muelle Bicaluga de Lisanza el domingo por la mañana, en lo que se suponía era una fiesta de cumpleaños.
Una fuente policial dijo que “el grupo visitó las Islas Borromeas, un archipiélago ubicado al oeste del lago, y se detuvo para almorzar en Isola Pescatori (Isla del Pescador). Los sobrevivientes nadaron hasta la orilla o fueron llevados a un lugar seguro por otros barcos.
La investigación se centra únicamente en el papel del capitán en el accidente, no en los antecedentes de los oficiales o por qué estaban en el área.
El periódico señala que los agentes israelíes sobrevivientes se fueron al día siguiente, cuando dos aviones de negocios fueron trasladados “desde “Israel” a Milán”, según el software de seguimiento de vuelos, tal vez para traerlos de regreso rápida y discretamente.
Source: Diversas