El régimen saudí literalmente sobornó a sus ciudadanos en medio de los crecientes llamamientos a protestar contra la monarquía por las medidas de austeridad impuestas debido al déficit presupuestario, señalan varios informes.
El rey saudí Salman emitió un decreto real que restauró “todas las asignaciones, beneficios financieros y bonos sociales” luego de las convocatorias de protestas en cuatro ciudades de Arabia esta semana, informó Al Waght.
El monarca también ordenó un bono adicional equivalente a dos meses de salario para las fuerzas del régimen involucradas en una agresión brutal e inhumana contra el vecino Yemen.
El pasado mes de septiembre, el monarca saudí redujo los salarios de los ministros en un 20 por ciento y los beneficios sociales para los empleados del sector público en una de las medidas más drásticas del reino para ahorrar dinero tras la caída de los precios del petróleo y el aumento de los costos de la agresión contra Yemen.
Las medidas fueron los primeros recortes salariales para los empleados públicos, que constituyen cerca de dos tercios de los trabajadores saudíes. Estas duras medidas de austeridad enojaron a muchos e impulsaron la disidencia clandestina, ya que impactaron negativamente en los saudíes ordinarios, mientras que la familia reinante continuaba saqueando los recursos del país.
Bajo el hashtag de Twitter “Movimiento del 21 de abril”, un grupo de saudíes distribuyó una declaración la semana pasada exigiendo el restablecimiento de los beneficios sociales, un alto a la venta de acciones del gigante petrolero estatal Aramco, una monarquía constitucional y la restauración de los poderes de la policía religiosa.
Las fuerzas de seguridad se alinearon en las calles del centro de Riad durante el fin de semana, aunque no se produjeron manifestaciones.
En otro movimiento para comprar la lealtad de los ciudadanos, el Banco Central de la monarquía instruyó a los bancos a mantener los actuales términos favorables en los préstamos al consumo y a la adquisición de propiedades.
Mientras tanto, para contener las voces disidentes dentro de la familia Al Saud, el rey enfermo también nombró a un puñado de jóvenes príncipes de varias ramas de la familia vicegobernadores en varias provincias del reino.
Source: Sitios Web