Las fuerzas israelíes agredieron el lunes a palestinos que conmemoraban el 69º aniversario de la Nakba, o Catástrofe, y varios palestinos sufrieron heridas de bala e inhalación de gases lacrimógenos durante dos marchas en Belén y Ramalá.
Al menos tres personas fueron hospitalizadas luego de que las fuerzas israelíes reprimieran violentamente una marcha de Nakbah en la ciudad cisjordana ocupada de Belén alrededor del mediodía del lunes. Un participante en una marcha describió el uso de la fuerza como una de las “peores experiencias de gas en la ciudad en cinco años”, señaló la agencia Ma’an.
Testigos dijeron que las fuerzas israelíes lanzaron gases lacrimógeno directamente a los manifestantes en la calle principal del norte de Belén, donde culminó la marcha, y continuaron lanzando más gases lacrimógenos a los que intentaban escapar, causando sufrimiento a la población.
Según la agencia oficial de noticias palestina Wafa, soldados israelíes también usaron granadas de aturdimiento y abrieron fuego contra los manifestantes con balas de acero recubiertas de caucho.
Al menos tres personas resultaron heridas de bala en sus extremidades y fueron evacuadas a un hospital para recibir tratamiento.
Mientras tanto, en la ciudad ocupada de Ramalá al menos siete manifestantes fueron heridos de bala después de la marcha celebrada para conmemorar la Nakbah y en apoyo de los prisioneros palestinos en huelga de hambre.
La marcha partió de una tienda de campaña solidaria en la Plaza Yasser Arafat, en el centro de Ramalá, y se dirigió hacia el puesto de control de Beit El donde las fuerzas israelíes lanzaron gases lacrimógenos y dispararon balas de acero recubiertas de caucho. La multitud espondió lanzando piedras.
En respuesta a una solicitud de comentarios, un portavoz del Ejército israelí dijo a Ma’an que se4 habían producido “disturbios violentos que involucraron a cientos de palestinos que lanzaron neumáticos ardiendo y piedras contra las fuerzas israelíes en Ramalá y Belén”.
Las fuerzas israelíes han sido objeto de repetidas críticas por su uso excesivo de la fuerza, así como por la utilización de métodos letales de “control de multitudes” que a menudo causan heridas o la muerte a los manifestantes, en un telón de fondo de lo que los críticos han llamado “cultura de impunidad” para los soldados israelíes.
Muchos manifestantes palestinos estaban vestidos con camisetas negras con el número 1948 escrito, marcando así el año de la Nakba cuando se creó la entidad sionista, un hecho que costó la vida a muchas decenas de miles de palestinos y dejó a unos 750.000 palestinos y a millones de sus descendientes convertidos en refugiados.
Los manifestantes también llevaban una gran bandera palestina y una bandera negra con la palabra “Volveremos” escrita en árabe.
Source: Maan y Wafa