El Emirato de Qatar dijo que varios hackers colocaron falsas declaraciones atribuidas al emir, Sheij Tamim bin Hamad al Zani, en el que éste criticaba la política exterior de EEUU en lo que parecía un intento de presentar a Qatar como un aliado indigno de confianza y demasiado cercano a los terroristas.
En sus declaraciones, Sheij Tamim manifestaba sus críticas a la actitud anti-iraní de Arabia Saudí y manifestaba su comprensión hacia Hezbolá y Hamas y sugería que Trump podría perder pronto el poder. Un portavoz qatarí dijo que el emir había acudido a una ceremonia de graduación militar, pero no pronunció allí ningún discurso.
Sin embargo, en un significativo gesto, otros países del Golfo Pérsico, como Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, permitieron que sus grandes medios estatales, como el canal Al Arabiya, recogieran tales declaraciones como si fueran verídicas.
Estos acontecimientos recuerdan la crisis entre Qatar y sus vecinos de 2014, que estuvo motivada por el respaldo de Doha a los Hermanos Musulmanes y otros grupos militantes en el mundo árabe. Significativamente, esta crisis tiene lugar poco días después de una visita a la región del Golfo por parte del presidente de EEUU, Donald Trump.
Este enfrentamiento puede tener influencia en los eventos en varios países de la región, como Libia, Egipto, Siria, Iraq y Yemen, donde esos países apoyan a grupos armados diferentes
El incidente tuvo lugar pocos días después de que Qatar se quejara de que estaba siendo el “objetivo de una campaña orquestada” en los días previos a la visita de Trump para presentar al emirato como el país que apoya a grupos terroristas en Oriente Medio, hecho éste que ha sido probado.
Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos han bloqueado el sitio web del canal de televisión qatarí Al Yazira por sus críticas a ambos gobiernos.
“Qatar ha roto las filas (de los países del Golfo Pérsico) y se ha alineado con los enemigos de la nación”, afirmó el diario saudí Okaz.
Este enfrentamiento ha salido a la luz pocos días después de que los reyes y emires del Golfo se reunieran con Trump en una cumbre de Riad y mostraran su acuerdo para aliarse contra los grupos militantes armados y contra el Irán shií. Menos de una semana después, se produjo la crisis de Qatar con sus vecinos y los gobiernos de Egipto y Sudán protagonizaron otra disputa.
Todo ello muestra que los acuerdos de tal cumbre fueron sólo papel mojado y el evento fue sólo una farsa.