Después de 40 días de huelga de hambre llevada a cabo por los detenidos palestinos, las autoridades de ocupación israelíes cedieron al fin a sus reivindicaciones.
El pasado sábado, el primer día del mes de Ramadán, los detenidos palestinos pusieron fin así a su huelga de hambre.
El jefe del comité encargado de los detenidos palestinos explicó que hacia las 4 de la mañana del sábado, los detenidos, dirigidos por el líder de Fatah, Maruan Barguti, anunciaron que habían suspendido su huelga de hambre. Ellos lograron un acuerdo con las autoridades penitenciarias de ocupación después de más de 20 horas de negociaciones en la prisión de Ashkelon.
Casi 1.600 detenidos palestinos observaron durante 40 días una huelga de hambre como protesta frente a las malas condiciones de detención.
Celebraciones
Las celebraciones estallaron en los territorios palestinos, después de que los prisioneros palestinos en las cárceles israelíes terminaran su huelga de hambre.
Mientras los palestinos celebraban el éxito de los presos con banderas y cantos sobre el terreno, los usuarios de los medios de comunicación social elogiaron la huelga de hambre de 40 días.
Los huelguistas reclamaban mejores servicios médicos, visitas familiares, el fin de la utilización de las celdas de aislamiento y condiciones de detención más dignas.
Los presos huelguistas de hambre estuvieron representados por Barguti y por otros responsables palestinos.
Las autoridades de ocupación se negaron al principio a sentarse en la mesa de negociaciones con los palestinos. Sin embargo, la determinación de los detenidos palestinos suscitó una ola de solidaridad y de condenas a nivel internacional.
Una treintena de presos fueron hospitalizados en estos últimos días debido al deterioro de su estado de salud, según la administración penitenciaria.
Para el experto palestino Abdel Mayid Suilem, se trata de una victoria de los prisioneros. Las “autoridades de ocupación israelíes, que no querían a ningún precio negociar con los representantes de los detenidos se vieron obligadas a hacerlo”, dijo a AFP. “Queda ahora ver si Israel cumplirá sus compromisos”, agregó.
Estos prisioneros llamaron así la atención del mundo sobre las condiciones de detención de 6.500 palestinos encarcelados por la entidad sionista, incluyendo mujeres y niños, y denunciaron el sistema legal israelí, que se aplica a los palestinos en los territorios ocupados.
El destino de los prisioneros es especialmente sensible entre los palestinos: más de 850.000 de ellos (para una población actual de 4,5 millones en los territorios) han pasado por las cárceles sionistas desde la ocupación israelí de los territorios palestinos en 1967.
Source: Agencias