Un prominente analista libanés subrayó que el alto poder balístico de Hezbolá funciona como una disuasión frente a las complots de Israel para lanzar una nueva guerra contra el Líbano.
“Aunque la reciente reunión (entre el presidente de EEUU Donald Trump y los líderes árabes) en Riad fue una invitación a la guerra y la presión contra Hezbolá, el régimen sionista es consciente del poder de los misiles de Hezbolá y cree que una guerra perjudicaría sus intereses en las actuales circunstancias”, dijo el martes Faisal Abdul Sattar.
También dijo que la reunión de Riad tuvo como objetivo impulsar la moral de los partidarios del eje estadounidense-saudí pero fracasó poco después de que surgieran desacuerdos entre Arabia Saudí y Qatar.
En unas observaciones realizadas hace unos días, el vicesecretario general de Hezbolá, Naim Qassem, dijo que la cumbre de Riad se celebró para sistematizar el saqueo del dinero del Golfo Pérsico por parte de EEUU y dijo que Hezbolá está dispuesto a hacer frente a todos los resultados de la cumbre.
Sheij Qassem dijo que la actitud negativa hacia el eje de la resistencia busca encubrir las consecuencias del despilfarro de las fortunas y las capacidades económicas de los pueblos de la región.
“La cumbre de Riad fue una reunión de los impotentes cuyos planes en varias áreas de la región se han visto frustrados” señaló negando que dicha reunión hubiera creado nuevas condiciones geopolíticas.
La cumbre de Riad no llevará a una guerra israelí contra el Líbano, según él. Sheij Qassem añadió que la Resistencia está lista, en cualquier caso, para confrontar y derrotar a los agresores.
Source: Fars News