El EI reivindicó el martes la muerte de 31 iraquíes a causa de atentados con explosivos en distritos capitalinos de mayoría shií, mientras sus integrantes sufrieron serios reveses por la ofensiva gubernamental en Mosul.
De acuerdo con fuentes médicas y policiales, 17 personas perdieron la vida y 32 resultaron heridas por la deflagración de un potente artefacto fuera de una popular heladería del barrio de Karrada, mientras otras 14 perecieron y 37 sufrieron lesiones por la voladura de un carro bomba en Shawaka.
Imágenes captadas por una cámara de circuito cerrado mostraron el momento de la explosión en una avenida muy concurrida con numerosos carros circulando en un horario en el que los creyentes musulmanes rompían el ayuno del recién iniciado mes sagrado del Ramadán.
Karrada fue escenario durante el Ramadán de 2016 del más mortífero atentado perpetrado en Bagdad en los últimos 13 años de guerra cuando un suicida de la agrupación takfirista (terrorista islámica sunnita) detonó el camión que conducía y mató a unas 324 personas.
En el mes santo musulmán, los fieles ayunan desde el alba hasta el ocaso del sol, cuando las familias se congregan para el ‘iftar’ (desayuno, en árabe) y acuden a restaurantes y café que quedan abarrotados durante casi toda la noche y madrugada.
Las autoridades de Iraq indicaron que el de Karrada fue un atentado de gran magnitud y describieron un escenario de edificios envueltos en llamas y carros dañados o tratando de abandonar el lugar del ataque, además de personas heridas clamando por ayuda.
Tras el segundo atentado contra la Oficina gubernamental de Pensión Pública cerca del puente Al Shahada (de los Mártires) en el concurrido barrio bagdadí de Shawaka, se reportaron otros cuatro hechos separados con explosivos dentro y en los alrededores de la capital con saldo de siete fallecidos y 19 heridos.
Source: PL