Detrás del teólogo musulmán Fethullah Gulen, a quien Ankara acusa de haber inspirado la intentona golpista de julio pasado, hay una red global que incluye más de un millar de entidades en 170 países, afirma el servicio de inteligencia turco MIT en un informe citado por el diario Hurriyet Daily News.
En su documento, el MIT identificó un total de 520 empresas, 269 fundaciones, 147 medios de comunicación digitales e impresos, 58 medios de comunicación audiovisuales, 252 organizaciones no gubernamentales, 327 asociaciones, 216 hospitales, centros lingüísticos y culturales, pero al mismo tiempo admitió que los números reales podrían ser mayores.
La “organización terrorista de Fethullah” (FETO) —nombre que las autoridades turcas usan en relación con el movimiento gulenista Hizmet (Servicio)— cuenta con 767 escuelas en el extranjero, desde la educación preescolar hasta las instituciones de enseñanza superior, pero se sospecha que la cifra real se aproxima a 1.000.
Para el MIT, es “una organización que opera en 170 países, desde los Balcanes hasta el Cáucaso, desde Asia Central hasta Europa, desde Norteamérica hasta el Lejano Oriente, desde Oriente Medio hasta África, utilizando la base de religión-dinero-política” y “desarrolló sus vínculos entablando comunicación con destacadas figuras religiosas cristianas y judías bajo el lema de Diálogo Interreligioso”.
El servicio de inteligencia turco sostiene que la organización descubrió su “verdadero rostro” después de la asonada del 15 de julio de 2016 y está “utilizando todas las redes que ha cultivado a lo largo de años” para criticar al gobierno turco y empujar a los países a adoptar una postura en su contra.
El propio Fethullah Gulen, quien vive autoexiliado en Pensilvania desde 1999 y en cuya extradición insiste Ankara, rechazó en repetidas ocasiones cualquier implicación en el fallido golpe de Estado en Turquía, afirmó que los golpistas traicionan sus ideales y acusó al actual mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, de construir un régimen dictatorial.
Source: Sputnik