Una manifestación masiva tuvo lugar en la ciudad yemení de Saada, el lunes por la mañana, para denunciar la quema de una copia del Sagrado Corán por parte del dirigente del partido político danés de extrema derecha Hard Line, Rasmus Paludan.
Los manifestantes expresaron su enfado por lo ocurrido por parte de las autoridades suecas, que permitieron quemar un copia del Sagrado Corán, y deploraron el silencio de algunos gobiernos árabes e islámicos a raíz de este crimen.
El gobierno de Yemen se sumó el lunes a la ola de condenas internacionales por la quema de una copia del Corán, libro sagrado de los musulmanes, durante una protesta en Estocolmo.
Ese acto es un insulto intencional a los sentimientos de todos los musulmanes, afirmó en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados de esta nación.
Durante una protesta celebrada la pasada semana en Estocolmo contra Türkiye, Rasmus Paludan, dirigente del partido político danés de extrema derecha Hard Line, quemó una copia del Corán frente a la embajada de Ankara.
El incidente provocó una ola de repudio en diversas latitudes, en especial en las naciones musulmanes.
Al respecto, el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, denunció el hecho al considerar que “la libertad de expresión no debe ser un pretexto para que los extremistas enciendan el fuego del odio entre seguidores de diferentes religiones”.
La Organización de Cooperación Islámica, el Consejo de Cooperación del Golfo, y Liga Musulmana Mundial también condenaron la profanación.
Source: Agencias